Yuriria, en Guanajuato

En esta ocasión le sugiero visitar la ciudad de Yuriria, cuyo principal atractivo es el convento agustino de mediados del siglo XVI; también tiene algunos espacios cívicos y culturales importantes; gastronomía típica; y una hermosa laguna

Redacción
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Convento agustino de Yuriria, Guanajuato
Foto: Internet

Por: Yolanda Trejo
ytrejo.paseo@gmail.com

El primer mes del año inicia en Guanajuato con varias fiestas tradicionales, entre las que destacan la de San Antonio Abad, en San Luis de la Paz (el día 17); el aniversario de la Fundación de la ciudad de León (20), y la fiesta de Tierras Negras en Celaya (21).

Al suroeste de la entidad hay sitios como el Valle de Santiago, que poseen un encanto especial; otros destacan por su intensa actividad económica o bien por su variada oferta turística, que incluye lagunas, manantiales de aguas termales, cráteres de volcanes apagados, cañadas y cavernas.

En esta ocasión le sugiero visitar la ciudad de Yuriria, cuyo principal atractivo es el convento agustino de mediados del siglo XVI; también tiene algunos espacios cívicos y culturales importantes; gastronomía típica; y una hermosa laguna, donde podrá vivir una experiencia incomparable con sus seres queridos.

La ciudad se encuentra relativamente cerca del estado de Michoacán; algunos de los pueblos cercanos tienen nombren en lengua purépecha. Es un sitio ideal para pasar un fin de semana y profundizar en el pasado histórico. Durante la época prehispánica esta región estuvo dominada tanto por grupos chichimecas como por tarascos. Hacia 1528 se creó la encomienda de Yuriria y se otorgó al conquistador Juan de Tovar.

Obras monumentales
El atractivo principal del Centro Histórico de Yuriria es el monumental convento agustino. La construcción inició en 1550 y concluyó nueve años después. Fue inaugurado el Jueves de Corpus. Desde la primera etapa constructiva se definieron los espacios sustantivos: dos claustros y varias celdas para los religiosos. El diseño fue realizado por un arquitecto español bajo la dirección de Fray Diego de Chávez y Alvarado, quien tuvo presencia importante en el desarrollo integral de la región.

El doctor Antonio Rubial García y el maestro Martín Olmedo Muñoz publicaron un texto en la revista Arqueología Mexicana, donde se anota que Diego de Chávez nació en Badajoz, España; sus padres fueron García de Alvarado y Teresa de Osma; arribó a México con sus tíos Pedro y Jorge de Alvarado y tomó el hábito agustino en la Ciudad de México con el nombre de Diego de San Miguel. Fue alumno de fray Juan de San Román, con quien inició las primeras fundaciones agustinas en el occidente de la Nueva España.

Ocupó el cargo de prior en los conventos de Tacámbaro y Tiripetío, así como en Yuriria. Murió en 1573, dejando un gran legado a la cultura de México. Conviene recordar que los agustinos habían arribado a la Nueva España en 1533 y cuatro años más tarde se establecieron en los límites de Guanajuato y Michoacán (antiguo reino tarasco), donde realizaron varias fundaciones. El convento e iglesia de San Agustín en Yuriria se consideró durante mucho tiempo la casa agustina más importante de la zona.

Buenos administradores
Frente al conjunto conventual se levanta un monumento en honor a Fray Diego de Chávez. El religioso porta crucifijo y sombrero. Otro elemento a destacar en la plaza es la lancha con flores y el letrero: ¡Viva Yuriria!, que enaltece el valor de la pesca en la economía local. El exterior del templo atrae por sus grandes proporciones y la riqueza decorativa de la portada. Destacan las esculturas de San Pedro y San Pablo, un grupo de ángeles músicos, numerosas caras de querubines, algunas figuras fantásticas y líneas que se unen para formar flores. En la parte más alta, la escultura del fundador de la Orden: San Agustín, en su carácter de obispo.

En el interior, la nave está cerrada con una bóveda de cañón corrido y el presbiterio presenta nervaduras góticas que acentúan la altura de los muros. En un ciprés neoclásico se venera la imagen de la virgen con el niño y a los lados se presentan dos esculturas: de San Agustín y Santa Mónica. También hay un retablo con el tema de La Pasión. En el coro se conserva un órgano antiguo.

En el convento, los símbolos poseen gran significado. Hay dos claustros (bajo y alto) con restos de la pintura mural original, en blanco y negro o con tintes de color. Deambular por los pasillos, percibir el aroma de los naranjos y respirar el aire del lugar permite recrear el ambiente del convento en el siglo XVI. Encontrará un antiguo fogón y una colección de arte sacro que incluye cruces, esculturas y pinturas, principalmente. Los botaguas asumen formas fantásticas y cumplen su función al evitar que el agua se acumule en la azotea. Una escalera con barrotes de madera torneada conduce al claustro alto, desde donde pueden apreciarse las columnas acanaladas, los capiteles y los contrafuertes.

El libro Los agustinos, aquellos misioneros hacendados, publicado en 1985 por la Secretaría de Educación Pública, contiene textos de un cronista agustino del siglo XVII, Diego de Basalenque, recopilados por Heriberto Moreno, que dan cuenta de las fundaciones que se hicieron a la entrada de tierra caliente y en la frontera chichimeca. Yuririapúndaro (hoy Yuriria) es un nombre en lengua purépecha y quiere decir Laguna de sangre. Se refiere al color que presenta el agua del lago que se encuentra en el interior de un cráter extinto (La Joya).

De una tonalidad verdosa, pasa al rojo intenso debido tal vez a la presencia de flora microscópica en el lago. Al otro lado del pueblo, hacia el norte, existe otra laguna muy grande, de agua dulce, donde los peces constituyen una verdadera riqueza para los pobladores; fue realizada de manera artificial gracias al empeño de fray Diego de Chávez. Yuriria alcanzó el rango de villa en 1852 y en 1914 fue declarada ciudad. Su escudo de armas contiene tres ahuehuetes y una roca que emana agua de manantial.

Trabajo comunal
El aspecto general del conjunto resulta muy agradable. Hay una torre que culmina en una espadaña (especie de campanario); la portada del templo es de estilo plateresco; y el portal tiene cuatro arcos que conducen al interior del área conventual. Cada espacio evoca la actividad que realizaron los misioneros y el esfuerzo de los indígenas que participaron en la construcción.

Además del sentido estrictamente religioso, en este espacio los indígenas se acercaron a las letras, la música, el canto, el teatro, la pintura, la escultura y la arquitectura. Como indica una cédula informativa, estas construcciones funcionaron también como focos de poblamiento y urbanización, como fortaleza para brindar protección y defensa, y como institutos de promoción artesanal.

Los agustinos se involucraron también en faenas agrícolas, importaron de Europa numerosas plantas y árboles frutales, mejoraron las cosechas de maíz e introdujeron el trigo. Los nuevos productos modificaron la dieta de los pueblos indígenas y enriquecieron la comida novohispana. Le sugiero la lectura de La evangelización de Mesoamérica, del doctor Antonio Rubial García, editada por Conaculta en 2002, donde encontrará información sobre los métodos que utilizaron las órdenes mendicantes para congregar y catequizar a los indígenas. Conviene saber que para 1602 los agustinos tenían 380 miembros en la Nueva España y administraban 67 conventos. Destacaron también como administradores de haciendas.

Belleza natural
La laguna de Yuriria es una de las primeras obras hidráulicas de la época virreinal, construida para regular las aguas del río Lerma y regar los terrenos agrícolas de la región. Actualmente es uno de los mayores depósitos hidráulicos de la entidad; tiene 17 kilómetros de largo por seis de ancho y cuenta con varias islas.

Es uno de los principales sitios de atracción turística y un lugar para pasear en lancha, practicar la caza y la pesca deportiva. Respecto de la flora de la región, abundan los bosques de encino, el mezquite y la selva baja caducifolia; la fauna incluye conejo, tlacuache, ardilla, zorrillo, peces de río y una variedad de aves. El clima es semicálido subhúmedo con lluvias en verano y la temperatura promedio alcanza los 19.2 grados centígrados. En la temporada invernal conviene llevar ropa abrigadora. Si realiza un paseo en lancha pregunte al conductor por el montículo donde se encuentran los restos de un altar prehispánico, lugar visitado recientemente por los turistas con motivo del Solsticio de Invierno. En las cercanías encontrará varios restaurantes que preparan pescados y mariscos. El platillo típico es el caldo michi, preparado con verduras y picante. Conozca las delicias gastronómicas del estado de Guanajuato.