La silla de ruedas eléctrica desarrollada por estudiantes del Instituto Politécnico Nacional (IPN) para que las personas parapléjicas puedan desplazarse con seguridad podría comercializarse en junio próximo.
El prototipo beta “Chair Goes” creado por estudiantes del Centro de Estudios Científicos y Tecnológicos (CECyT) 4 Lázaro Cárdenas ayuda a quienes tienen lesiones en la espalda y adultos mayores a trasladarse de manera autónoma, así como subir y bajar escaleras.
La silla de ruedas cuenta con tres celdas solares retráctiles de acuerdo con las indicaciones de la Norma Oficial Mexicana (NOM) 001, para recargar tres baterías durante el día y puede recibir energía de un conector normal de 120 volts.
Además de dos motores de 24 volts y se enciende con una llave que acciona el sistema eléctrico para avanzar o retroceder, también prende luces intermitentes y la nocturna, cuando es necesario.
El IPN destacó que la invención acelera con un gatillo y posee un freno de balata en la parte frontal como el de las bicicletas, para detenerse y evitar accidentes.
Brandon Michelle Vázquez Guadarrama, Alejandro Soriano Gonzaga y Sergio Ernesto Bustos Rodríguez, creadores de la “Chair Goes”, indicaron que esta nueva versión soporta un peso de hasta 160 kilos, se desplaza a 15 kilómetros por hora y tiene un asiento ergonómico que es más ligero pero resistente.
La presentación de este invento pretende recabar los fondos que les permitan cubrir los gastos de la patente, sin embargo, los creadores trabajan en el modelo comercial que tendrá un generador electromagnético que producirá su propia energía, además de otras novedades en cuanto a comodidad, peso, autonomía, velocidad y facilidad de transporte.