Debido a que en esta época del año son frecuentes las inversiones térmicas, deben revisarse las condiciones climáticas antes de exponerse a hacer ejercicio, afirmó el experto del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), César Alberto Navarrete Hernández.
Otro factor importante es la hidratación ya que, contrario a lo que se piensa, en esta temporada el organismo consume más agua, afirmó el jefe del Departamento de Deporte y Cultura Física del IMSS en Jalisco.
Indicó que realizar actividad física intramuros e, incluso, abstenerse de llevarla a cabo si el único espacio disponible es al aire libre, son parte de las recomendaciones para quienes practican alguna clase de deporte o ejercicio también durante el invierno.
“De lo contrario podrían desarrollar desde patologías que afectan vías respiratorias altas (nariz, garganta) o bajas (pulmones), hasta descompensaciones electrolíticas”, afirmó.
Dijo que durante esta época son frecuentes las inversiones térmicas por los altos índices de contaminación. “Si una persona suele salir a correr a determinada hora del día (mañana, tarde o noche) debe evaluar, antes de exponerse a la intemperie, las condiciones ambientales”.
Navarrete Hernández resaltó la importancia de la hidratación porque si no la tenemos también vendrán afecciones en la mucosa y en la piel. Existen muchos mitos sobre si se debe o no tomar agua en invierno, la respuesta es sí porque el organismo de hecho consume más agua.
“No hay una cantidad preestablecida, eso lo determinará el propio organismo, pero es importante beber agua simple también para desintoxicarse en esta temporada de excesos alimenticios ricos en sales, grasas, azúcares, condimentos, etcétera”, recalcó.
Añadió que si la actividad física es continua y dura más de 30 minutos, se pueden consumir ocasionalmente bebidas isotónicas para recuperar sales minerales, pero de ninguna manera estos productos comerciales deben sustituir al agua simple.
Agregó que el resultado podría ser contraproducente debido a que estos líquidos contienen azúcares, contraindicados sobre todo en personas con enfermedades crónico degenerativas, como es la diabetes.
“Una vez tomadas en cuenta estas recomendaciones, el siguiente paso es no olvidar que la actividad física debe llevar un previo calentamiento y ejercicios de flexibilidad para evitar daños en las articulaciones y los músculos. Sea cual sea el ejercicio, caminata, pesas, bicicleta, patín del diablo, etcétera, se debe ir de menos a más, de acuerdo con las características físicas de la persona, su edad y su experiencia en cualquier disciplina”, acotó.