Los ojos pueden evidenciar padecimientos no sólo oculares como conjuntivitis bacteriana o alérgica, sino originadas en otras partes del cuerpo, como la retinopatía diabética que es causada por diabetes, o bien la enfermedad en tiroides, que lastima las córneas, así como alteraciones inmunológicas como artritis reumatoide o lupus, que pueden producir inflamación en el globo ocular.
De ahí la importancia de realizarse un chequeo anual.
La oftalmóloga y jefa de Servicio de Enfermedades Inflamatorias Oculares en el Hospital Nuestra Señora de la Luz, Stephanie Voorduin Ramos, advirtió que el ojo rojo es una señal de que existe un agente agresivo, ya sea por factores ambientales o un padecimiento del sistema circulatorio que se refleja en los ojos.
“Muchas veces se minimiza el que las personas tengan ojos irritados y recurren al uso de compresas con te de manzanilla o a gotas, pero es importante conocer qué es lo que provoca el malestar antes de que sea algo más grave”, recomendó.
La especialista explicó que en el caso de las alergias en ojos, causadas por contaminación ambiental, caspa de mascotas, polen y polvo casero, se confunde mucho con las conjuntivitis bacteriana y viral.
“Los niños con problemas de asma y rinitis alérgica es probable que sufran también de alergias en ojos, lo cual afecta su calidad de vida, en el hogar y en la escuela. Aunque no se cura, es posible controlar las molestias con medicamentos y más higiene”, precisó.
Resaltó que entre los síntomas se encuentran: comezón, ojos irritados, hinchazón de los párpados, caída de pestañas. “Las alergias no se quedan solo como un problema ocular, sino que puede degenerar en síndrome de ojo seco o blefaritis, condición que a la larga puede complicarse con infecciones. Las lágrimas tienen la función de barrer la superficie ocular, de diluir alergenos, pero en el caso de que no exista humedad, la limpieza y lubricación no se va a realizar y los alergenos aprovecharán para afectar los ojos”, mencionó Voorduin Ramos.
La también miembro del Consejo Mexicano de Oftalmología, compartió que cuando ambos padres presentan alergias, el hijo tiene 70% de posibilidades de padecerla y cuando no hay carga genética, los niños pueden presentar alergias en 15 % de los casos. “Cada vez es más frecuente que los pacientes pediátricos tengan alguna alergia”, precisó.
La orftalmóloga señaló además que hay alergias en los ojos crónicas y agudas. “En el momento en que el problema dura más de tres meses, estamos hablando de que ya es crónico el asunto y rara vez vemos alergias agudas. Por ejemplo, las personas que son alérgicas a los gatos, en cuanto llegan a una habitación donde está la mascota empiezan a sentir comezón, hinchazón y los ojos se les irritan, pero al salirse de la zona, los ojos recuperan su estabilidad, entonces estamos hablando de un cuadro agudo”.
La alergia es una respuesta exagerada del sistema inmunológico, que reacciona ante la presencia de un alergeno. “El problema es que a veces se confunde con una conjuntivitis bacteriana y el médico general receta antibióticos, cuando en realidad podría tratarse de un cuadro alérgico. Un síntoma cardinal en las alergias es la comezón o picor, es algo que siempre estará presente”, resaltó.
Destacó que las conjuntivitis pueden ser de tipo alérgico, bacteriano y viral. Incluso, las hay de tipo químicas. La prevalencia de las conjuntivitis alérgicas es del 20-25% de la población en general.
“La mayor incidencia es en los lugares donde hay mayor polen, vegetación, humedad; ahí es donde el número de casos se incrementa. Pero tenemos conocimiento de zonas urbanas en donde todo el tiempo hay casos, ya no solo en primavera”, expuso.