México, 6 de marzo. Cuando existe dolor al caminar o al permanecer de pie, calambres, debilidad o entumecimiento de las piernas, existencia de llagas en la planta de los pies o cambio de color de la piel, son algunos síntomas de la Enfermedad Arterial Periférica (EAP) que afecta a más de 202 millones de personas en el mundo.
Cada siete minutos se realiza una amputación de piernas derivado de este padecimiento que se presenta en las arterias periféricas, responsables de irrigar las extremidades o piernas, mismas que sufren un endurecimiento de sus paredes, además de que en su interior se forman placas de grasa que impiden la libre circulación sanguínea, explicó Gerardo Peón Peralta, médico angiólogo.
Entre las principales complicaciones de la EAP, señaló el también miembro de la Sociedad Mexicana de Angiología y Cirugía Vascular, destaca la isquemia aguda donde hay una disminución repentina del riego sanguíneo en la extremidad. Pero si llega a evolucionar a isquemia crítica, un riego sanguíneo muy disminuido, el resultado puede ser la muerte del tejido o la amputación, advirtió el especialista.
Peón Peralta explicó que ésta situación se presenta en personas mayores de 70 años, así como en aquellas que tienen diabetes mellitus, problemas de hipercolesterolemia o niveles de colesterol altos en sangre, que tienen una vida sedentaria, con sobrepeso y obesidad.
Los métodos de diagnóstico por excelencia son: ultrasonido doppler, angiotomografía o una angioresonancia magnética, para conocer el funcionamiento de la circulación sanguínea en las piernas.
Hasta hoy, el tratamiento de la Enfermedad Arterial Coronaria y Enfermedad Arterial Periférica se basaba en un estilo de vida saludable (alimentación sana, ejercicio, abandono del tabaco, reducir el estrés y evitar la obesidad), y un adecuado control de enfermedades asociadas como hipercolesterolemia, hipertensión arterial y diabetes mellitus, aunado a procedimientos quirúrgicos como cirugías de angioplastia o de derivación (by pass) para ambos casos, o de revascularización para EAP.
Para ganar la lucha en contra de estas enfermedades, la Cofepris aprobó en México un régimen de terapia combinada de rivaroxabán en conjunto con Aspirina Protect (ácido acetilsalicílico) para la prevención de eventos tromboembólicos en adultos con Enfermedad Arterial Coronaria (EAC) y Enfermedad Arterial Periférica (EAP) con riesgo elevado de sufrir eventos cardiovasculares mayores como infarto de miocardio y evento vascular cerebral.
Este nuevo esquema terapéutico basado en los datos del estudio de fase III COMPASS, logró reducir el riesgo combinado de evento vascular cerebral, muerte cardiovascular e infarto de miocardio (ataque cardíaco) en un 24% en pacientes con Enfermedad Arterial Coronaria o Enfermedad Arterial Periférica en comparación con la administración de 100 mg de ácido acetilsalicílico una vez al día en monoterapia, destacó Alejandra Meaney, cardióloga y Medical Affairs Operation Manager de la División Pharmaceuticals de Bayer de México.
Junto con la aprobación de las autoridades sanitarias nacionales de estas nuevas indicaciones para rivaroxabán, se suman las autorizaciones de agencias internacionales como la Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés) y la Administración de Alimentos y Medicamentos de los Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés).