Con el objetivo común de alcanzar el progreso del país y el bienestar de sus habitantes el gobierno federal y el sector empresarial mexicano reconocieron el papel fundamental que cada uno de ellos tiene para lograrlo: un crecimiento económico sostenido y superior al de las últimas dos décadas, como pretende la actual administración, requiere el apoyo decidido de la iniciativa privada.
De igual manera es primordial el trabajo de los responsables del aparato gubernamental (incluida la labor de los políticos) para impulsar empleos mejor remunerados, propiciar mayor bienestar social e impulsar la productividad en las empresas, todo con la finalidad de conseguir una prosperidad incluyente que empate el desarrollo económico con mejores condiciones de vida de la población.
El compromiso asumido por el presidente Andrés Manuel López Obrador con el dirigente entrante del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Carlos Salazar Lomelín, para alcanzar un crecimiento promedio de 4% anual, eliminar la pobreza extrema en un periodo de seis años, que la actual administración incremente las inversiones y se combata la corrupción fue sellado con un “trato hecho” firme por parte del Ejecutivo federal.
Así, en medio del reto que representa lograr esas ambiciosas metas durante la presente administración, ambas partes asumieron la responsabilidad de realizar sus mejores esfuerzos a favor de México.
“Lo hemos dicho en varias ocasiones y lo repito ahora: se necesita crecer y no puede lograrse una tasa de crecimiento económico de 4% al año en promedio si no se cuenta con la participación del sector privado, nacional y extranjero”, subrayó el mandatario.
López Obrador resaltó que el modelo que su gobierno quiere impulsar y ya pone en práctica es que la inversión pública sea básicamente capital semilla y se complemente con inversión privada nacional y extranjera.
Carlos Salazar destacó a su vez el lugar relevante que otorga el Ejecutivo federal a los empresarios en su proyecto para la transformación del país y se dijo convencido de que una empresa tiene sentido cuando al producir el valor económico también genera valor social.
El nuevo líder del sector empresarial se manifestó por lograr un equilibrio “para que en la economía prevalezca un sentido social y para que las demandas sociales no desborden las posibilidades de la economía. Equilibrio para que las aspiraciones de justicia social sean compatibles con la satisfacción fundada que obtiene toda persona al recoger el fruto de su trabajo, esfuerzo y talentos”, recalcó.
Se trata del equilibrio ideal que debe resultar del hecho de que cada cual aporte su grano de arena para garantizar una prosperidad incluyente.
Salazar Lomelín destacó ante el presidente López Obrador: “Hagamos historia. Nosotros le ayudamos. Podemos movilizar a los sectores más organizados de la sociedad para lograr este objetivo”.
Compromiso común
Durante la XXXVI Asamblea Anual Ordinaria del CCE, donde rindió protesta como presidente, Salazar Lomelín destacó la función relevante de los empresarios, con independencia de las ideologías o las épocas, y destacó que empresa sin sociedad es una injusticia y sociedad sin empresa es una quimera.
Hizo notar que el empresariado no actúa en una burbuja y la prosperidad compartida se nutre también de las decisiones de quienes conducen los asuntos de Estado.
Al igual que el empresario, apuntó, el político nace como un idealista e imagina los grandes cambios sociales que promoverá si alcanza una posición de liderazgo.“Aquí empresarios y políticos tenemos al final del día un compromiso común: el bienestar de la población y el progreso de México”.
Ante representantes del CCE e integrantes del gabinete presidencial, Salazar consideró que cuando hay un quehacer político con visión, con objetivos claros, con mejoras para todos y, sobre todo, cuando se cumple con esta difícil tarea de equilibrio de los distintos intereses sociales la política contribuye decisivamente a ese bienestar.
“La clave para el equilibrio en cualquier país es la preeminencia del Estado de Derecho”, afirmó, al aseverar que es imperativo que todos y cada uno cumplan con el marco legal.
Recordó que a lo largo de la historia los empresarios han sabido trabajar de manera respetuosa y comprometida con líderes que representan la legalidad, la legitimidad y las instituciones de la República. “Sabemos bien que cuando actuamos unidos, resistimos más”, añadió.
Confianza
El líder del sector empresarial reconoció que México crece de manera insuficiente, insatisfactoria e inequitativa, con regiones que avanzan y otras con las que se tiene una deuda de siglos, con una situación de pobreza y marginación que no merece el país.
Ofreció al presidente de la República la colaboración de los empresarios para impulsar el crecimiento económico, misión en la que aseguró no buscan ningún privilegio. “Queremos acompañarlo, estamos preparados y capacitados para ayudar”.
Salazar Lomelín expuso las acciones concretas que se propone impulsar al frente del organismo empresarial: activar la participación de los pequeños empresarios como gran motor del desarrollo económico, integrar mejor las cadenas productivas para abrir oportunidades de inversión y empleos, impulsar al sector privado como fuente de propuestas para mejorar la actividad productiva y alcanzar el equilibrio entre economía y sociedad.
También delineó cinco principios a los que se comprometen los empresarios organizados del país: ofrecer, de manera fidedigna y sin engaños, bienes y servicios de calidad a los mejores precios; cumplir con la ley, pagar impuestos y contribuciones sociales; tratar a los trabajadores con respeto y dignidad, con salarios justos y de acuerdo con su productividad; aceptar e incluir en las empresas a todas las personas, sin distinción de género, orientación sexual, raza, origen, credo, preparación y discapacidad, y comprometerse con la comunidad, tanto en el desarrollo económico como en el ambiental.
“Vamos a proponer más que a reaccionar. Nuestro trabajo será solo proponer, nunca decidir. Los empresarios no debemos hacer política. Pero sí estamos obligados, como miembros que somos de la sociedad, a interesarnos en lo público. Todo aquello que incida en una mejor convivencia social debe ser materia de nuestro interés y confiamos en que usted, señor presidente, sus colaboradores y el Poder Legislativo nos vean como un sector comprometido con México”, puntualizó.
Inversión
Propuso al presidente López Obrador eliminar la pobreza extrema en un plazo de seis años, para lo cual se convocará al país en su conjunto. Y exhortó al jefe del Ejecutivo federal a hacer de la inversión una obsesión.
Pero para que el país crezca 4% anual, resaltó, se necesita una inversión de entre 25 y 27% del Producto Interno Bruto (PIB). Y recordó que en los últimos años la inversión pública se ha reducido y la privada, aunque ha crecido, no alcanza a compensar la primera y no se llega a los niveles necesarios.
Un buen ejemplo de colaboración, expresó, “es el programa Jóvenes construyendo el futuro, en el que se tienen identificadas casi 80 mil empresas que darán cabida a miles de jóvenes para su entrenamiento y preparación para una vida productiva”.
El dirigente empresarial insistió en que los mexicanos quieren una vida en paz, de trabajo, de esfuerzo, en plena libertad, en la que cada joven tenga acceso a las oportunidades; donde la movilidad social sea una realidad y un incentivo para todos aquellos que sueñan con progresar.
“Aspiramos a tener comunidades fraternales con el que menos tiene. ¡Queremos un México en el que todos pongamos y en el que todos ganemos! Esto se logrará únicamente si permanecemos unidos y si todos y cada uno de nosotros respetamos la legalidad y el Estado de Derecho”, concluyó.
Economía mixta
El presidente López Obrador destacó en su participación ante el CCE que es muy importante contar con el apoyo del sector empresarial para el propósito de lograr entre todos que haya crecimiento de la economía.
Expuso que el modelo que impulsa su gobierno es que se combine la inversión pública con la inversión privada nacional y extranjera, y recordó que hay una tradición de economía mixta que ha dado resultados en el país, sobre todo en el periodo conocido como desarrollo estabilizador, en el que se logró que actuaran de manera conjunta los sectores público, privado y social, lo que propició el crecimiento de la economía.
El mandatario agregó que a él le tocó aplicar este modelo cuando fue jefe de Gobierno en la Ciudad de México y pudo comprobar sus bondades con la realización de varias obras, como la rehabilitación del Paseo de la Reforma y del Centro Histórico, entre otras. Ese mecanismo permitió que por cada peso que invirtió el gobierno local la iniciativa privada invirtiera de 30 a 40 pesos.
“Eso es lo que queremos que se aplique en este sexenio para reactivar la economía.
Así será la inversión para construir el Tren Maya, dos mil 500 kilómetros de vías para este tren moderno de turismo, de transporte de pasajeros y de carga; es una inversión de 120 a 150 mil millones de pesos que no podría hacer el gobierno; no puede la hacienda pública financiar un proyecto de esta magnitud”, expuso el presidente.
Y afirmó que su gobierno está favor de la apertura económica, financiera, “pero nos gustaría mucho que si hay capital nacional se invierta en este proyecto y en otros”.
Tras destacar que hay muchos proyectos para que el gobierno federal y los empresarios participen de manera conjunta, le tomó la palabra al nuevo dirigente del CCE respecto de las dos propuestas planteadas.
“Desde luego, le tomo la palabra en sus dos propuestas, y agrego una: él plantea que hagamos el compromiso primero de que haya inversión para crecer a 4%. De acuerdo, trato hecho. Dos, dice Carlos: ‘Hacer el compromiso para acabar con la pobreza en el sexenio’. Pues bien, trato hecho”.
A su vez el presidente hizo una propuesta: que entre todos se haga el compromiso de acabar con la corrupción, lo que fue respaldado por los empresarios, ante quienes se comprometió a otorgarles el apoyo y el respaldo del gobierno de la República.
Seguridad jurídica
El compromiso asumido por el presidente y los empresarios para detonar el crecimiento económico, abatir la pobreza extrema y acabar con la corrupción sin duda representa un punto de inflexión de cara a los retos y desafíos que enfrentará México en los próximos seis años.
Sin embargo, como afirmó el nuevo presidente del CCE, el respeto a la ley y el Estado de Derecho son aspectos y valores centrales en las democracias liberales, donde la prevalencia de la seguridad jurídica es una garantía para que los ciudadanos sean iguales ante la norma jurídica y que esta a su vez sea observada por los ciudadanos para regular la convivencia ciudadana.
Para los expertos la observancia de las leyes establecidas en una sociedad es condición necesaria para evitar la arbitrariedad jurídica, la aplicación retroactiva de la norma y el cambio del marco legal, incluso con la violación de lo establecido en la Constitución, lo que llega a generar vacíos o contradicciones en las leyes.
Por ello, insisten, la vigencia de las leyes y un Estado de Derecho que garantice el respeto de la propiedad privada y el libre comercio son condiciones indispensables para generar confianza y certidumbre en la inversión, en el emprendimiento y en el desarrollo económico del país. Solo observando lo anterior permite que los esfuerzos del gobierno federal y los empresarios del país lleguen a buen puerto.
Qué es el CCE
El Consejo Coordinador Empresarial es un órgano representativo y de interlocución de los empresarios mexicanos, que trabaja para impulsar el libre mercado, la democracia plena, la responsabilidad social y la equidad de oportunidades para la población.
Tiene como objetivo coordinar las políticas y las acciones de los organismos empresariales e identificar posiciones estratégicas con soluciones específicas, que contribuyan a diseñar políticas públicas para elevar el crecimiento económico y el nivel de la competitividad.
Se ha fijado como responsabilidad la generación de más y mejores empleos formales, fomentar una distribución equitativa de la riqueza, fortalecer el salario real, asegurar un mejor entorno de negocios y exigir a las autoridades cumplir su mandato constitucional.
Sostiene que para lograr un crecimiento sostenido por encima de 4% anual se requieren políticas públicas dirigidas a detonar la inversión (tanto pública como privada), el empleo formal y el Estado de Derecho.
Sector privado
El sector empresarial en México está compuesto por un millón 300 mil empresas que hacen posible la existencia de casi 18 millones de empleos formales y la generación de 80% del Producto Interno Bruto privado del país.
La iniciativa privada tiene un rol fundamental para el desarrollo de la economía de mercado ya que representa la mayor fuente de empleos y de inversión.
Compromisos empresariales
Ofrecer, de manera fidedigna y sin engaños, bienes y servicios de calidad a los mejores precios.
Cumplir con la ley, pagar impuestos y contribuciones sociales.
Tratar a los trabajadores con respeto y dignidad, con salarios justos y de acuerdo con su productividad.
Aceptar e incluir en sus empresas a todas las personas, sin distinción de género, orientación sexual, raza, origen, credo, preparación y discapacidad.
Están comprometidos con su comunidad, tanto en el desarrollo económico como en el ambiental.
Ejemplo de colaboración
A tres días de su triunfo en la elección presidencial de 2018 el entonces virtual presidente electo y el sector empresarial anunciaron el programa Jóvenes construyendo el futuro, que pretende garantizar el derecho de los jóvenes a la educación y al empleo.
Explicó el hoy presidente que a los jóvenes se les “va a contratar como aprendices para que tengan trabajo. Los empresarios van a actuar como tutores. El gobierno va a transferir a las empresas recursos del Estado para pagar la nómina de estos jóvenes. En total se atenderá a 2.6 millones de este sector de la población”.
El nuevo dirigente del CCE destacó que un buen ejemplo de la colaboración entre el gobierno federal y los empresarios es el citado programa, en el que se tienen identificadas casi 80 mil empresas que darán cabida a miles de jóvenes para su entrenamiento y preparación para una vida productiva.
Habrá avance económico: AMLO
El presidente Andrés Manuel López Obrador refrendó que habrá avance económico en México, para lo cual se cuenta con el apoyo del sector empresarial nacional, que le ofreció ayudar para crecer a 4% anual. “Les vamos a demostrar que va a crecer más la economía; hicimos un trato con los empresarios, de primera”, expuso el mandatario federal luego de que el Banco de México (Banxico) ajustó la proyección de crecimiento económico del país para este año entre 1.1 y 2.1%, un crecimiento promedio de 1.6% anual en el primer año de su administración. Ante estas estimaciones López Obrador indicó que se deben tomar en cuenta todos los antecedentes, todo el contexto: “No solo se puede ver el árbol sin ver el bosque”, observó. En este sentido mencionó que en los primeros años de administraciones pasadas la economía descendió y ahora “están diciendo que el primero de nosotros será de 1.6%; está bien, lo aceptamos, estamos empezando”.