Llevar a la Secretaría de Educación Pública (SEP) a todos los estados es uno de los objetivos de Aurelio Nuño Mayer como nuevo responsable de la educación, quien también propone un nuevo sistema de coordinación entre la Federación y los estados mediante la división del país en cinco regiones educativas.
Nuño asegura estar convencido de que la reforma educativa, así como los temas educativos en general, pueden llegar a buen puerto si existe una estrecha colaboración entre los gobiernos estatales, las entidades federativas y el gobierno de la Ciudad de México, con el gobierno federal.
A unos días de asumir el cargo Nuño Mayer reitera que se ha propuesto ser un secretario de Educación muy cercano a los maestros, a los padres de familia, a los alumnos, así como a los gobernadores y a las autoridades educativas estatales.
“Quiero que la Secretaría de Educación vaya físicamente hasta los últimos puntos de la geografía nacional y que en cada región del país pueda entender y conocer las dificultades que enfrenten y que también conozcan las visiones y las complicaciones que vemos desde acá”, resalta.
Y aclara que la evaluación no se diseñó para castigar a los maestros ya que, por el contrario, su objetivo es ayudarlos a que sean mejores docentes y con ello elevar la calidad de la educación en México.
Nueva coordinación
El nuevo titular de la SEP dice que seguir transformando y lograr el cambio educativo que se ha propuesto el gobierno federal no puede hacerse en solitario: ni la Federación ni los estados pueden hacer este cambio de manera individual, por lo que se requiere una cooperación muy estrecha.
Nuño se compromete por ello a recorrer el país para “platicar con todos los maestros de México, para platicar con los padres de familia, con los alumnos”, incluidos gobernadores y autoridades educativas locales, a fin de tener una nueva coordinación en materia educativa.
De ahí que durante la reunión del Consejo Nacional de Autoridades Educativas anunció la propuesta de crear un nuevo sistema de coordinación entre el gobierno federal y los estados mediante la división del país en cinco regiones.
La primera región es la zona noroeste, integrada por los estados de Baja California, Baja California Sur, Chihuahua, Sinaloa y Sonora.
La segunda será la zona noreste, conformada por Coahuila, Durango, Nuevo León, San Luis Potosí y Tamaulipas.
En tanto que la región tres será la zona occidente, formada por Aguascalientes, Colima, Guanajuato, Jalisco, Michoacán, Nayarit, Querétaro y Zacatecas.
La región cuatro será la zona centro, en la que estarán el Distrito Federal, el Estado de México, Hidalgo, Morelos, Puebla y Tlaxcala.
- Y por último, la quinta región corresponderá a la zona sur-sudeste, conformada por Campeche, Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Quintana Roo, Tabasco, Veracruz y Yucatán.
Arturo Nuño propone que cada tres meses acudan, él como titular de la SEP, los subsecretarios de la dependencia y todas las autoridades educativas que sea pertinente, a una reunión con los gobernadores y con los secretarios de Educación de estas cinco regiones, con la finalidad de hacer un análisis de cómo se avanza por cada estado en estas áreas en la reforma educativa y el resto de las metas que se tienen trazadas.
“Quiero que sea, y esa es mi propuesta, un diálogo completo e integral; un diálogo en donde la autoridad federal puede escuchar de las autoridades locales cuáles son sus problemas, cuáles son los retos que tienen que vencer y cómo podemos coadyuvar para solucionar esos problemas”, resalta Nuño Mayer.
Este nuevo mecanismo, añade, permitirá que de manera coordinada, unida y eficaz se puedan resolver cada uno de los temas, que haya una agenda puntual para revisar cómo se avanza en cada estado y en las regiones con la reforma educativa y cómo poder hacer juntos a cada uno de los retos que enfrentan.
“Quiero romper, en este sentido, con muchos años y décadas, de un cierto aislamiento del centro con los estados; de no tener el diálogo suficiente de la Federación con los estados y que tengamos mecanismos de coordinación mucho más eficaces para cumplir con la tarea que todos nosotros tenemos y que al final es una misma”.
Cercano a los maestros
El secretario de Educación tiene claro que su misión es cumplir con el objetivo de la reforma educativa, que es elevar la calidad de la educación en México: “Y entendiendo precisamente que los retos de cada uno de los estados, los retos de cada una de las regiones, son distintos”; y es necesario identificarlos claramente “para que podamos trabajar con el mismo objetivo, pero con las estrategias que se requieran para cada estado y para cada región”.
Aurelio Nuño destaca que el reto del siglo XXI es la calidad de la educación y por ello era fundamental la reforma educativa, transformar las reglas del sistema educativo que estaban pensados en la lógica del siglo XX.
De ahí la necesidad de expandir el sistema educativo y de incorporar a los maestros y maestras del país al cambiar las reglas que permitieran la calidad en la educación.
“Por eso mi nueva tarea como secretario de Educación, la número uno y el encargo central que tengo del presidente de la República, es implementar esta reforma transformadora para crear el sistema público de educación del siglo XXI para México”, recalca.
También dice que estará abierto a la sociedad civil para escuchar a las organizaciones que tengan algo que decir respecto a la educación, así como con los intelectuales, los medios de comunicación y a todos los sectores involucrados con el quehacer educativo. “Voy a recorrer el país para dialogar con los maestros, para escucharlos; pero también para pedirles que me escuchen y que escuchen la visión del presidente y del gobierno, y que juntos, en diálogo y en entendimiento y con una gran cercanía, implementemos esta reforma histórica. Una reforma de la que, como lo ha dicho el presidente de la República, los grandes protagonistas son ustedes: los maestros y las maestras de México”.
Diálogo
Aurelio Nuño recuerda que uno de los proyectos centrales educativos del presidente ha sido que el Estado recupere la conducción de la política educativa, por lo que se dice convencido de que será un titular de Educación que ejerza liderazgo: “Pero esa conducción de la política educativa será democrática y con diálogo con todos los sectores”, que empezará con los maestros.
Menciona el tema de la evaluación educativa, el más polémico de la reforma, que afirma que no se hizo para castigar a los maestros. “Ese no es el objetivo de la evaluación, todo lo contrario: el objetivo es ayudar a los profesores a que les vaya mejor, a que sean mejores maestros y que a través de ello eleven la calidad de la educación de este país”.
Hace énfasis en señalar que las evaluaciones permitirán saber qué están haciendo bien los maestros, pero también en qué hay que mejorar, además de que la reforma educativa les da el derecho a la formación profesional, en tanto que la autoridad tiene la obligación de darles un acompañamiento de excelencia y de calidad para que se sigan preparando.
“La instrucción que tengo del presidente, y será una de mis primeras tareas, es mejorar y consolidar todos los sistemas de enseñanza continua y de formación profesional docente que nos toca a nosotros, como autoridad educativa, para elevar la calidad de la educación”.
Evaluación con contexto
Agrega que con pleno respeto a la autonomía del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) trabajará con esta institución para hacer realidad otro elemento de la reforma que en las evaluaciones se deberán de tomar en cuenta los contextos regionales y socioculturales, aspecto que aclara no es una concesión ya que está en la ley y es parte de la reforma educativa, “para que tengamos mejores evaluaciones que tomen en cuenta los contextos que enfrentan cada maestro”.
Insiste en que el objetivo es tener evaluaciones de calidad en todo el país para que mejore la enseñanza, por lo que es necesario reconocer las circunstancias en cada región del territorio nacional, ya que no son iguales los retos que tienen los maestros de Nuevo León que los del Bajío, los del centro o los del sur del país.
“Esos retos distintos deben entenderse y tomarse en cuenta en la evaluación”, recalca.
Agrega que a los maestros que salgan bien evaluados mejorarán sus finanzas, pues derivado de la reforma educativa hay un nuevo sistema de incentivos en el cual a quienes les vaya bien les irá mejor económicamente, ya que a lo largo del tiempo y a través de estos incentivos podrán incrementar en hasta 180% el sueldo que perciben, y en las regiones más lejanas hasta 220 por ciento.
Por ello, concluye, la evaluación no está construida, como se ha querido hacer creer, para afectar a los maestros: “Está construida para ayudarlos, para apoyarlos, para que sean mejores maestros, para que les vaya mejor. Y como secretario de Educación me voy a empeñar en que así sea”.