México, Ciudad de México, 1 de octubre. Con el acuerdo Estados Unidos, México y Canadá (USMCA, por sus siglas en inglés), anunciado la noche del domingo, el país estará mejor posicionado para impulsar los programas prioritarios que planteó el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador.
Así lo aseguró Marcelo Ebrard Casubon, propuesto como próximo canciller mexicano por López Obrador, al señalar que el nuevo instrumento comercial permitirá mantener la estabilidad económica y la competitividad del país.
De esta manera, el futuro gobierno “refrenda el compromiso de promover el crecimiento y mantener la estabilidad para mejorar las condiciones de vida de todos los mexicanos”, dijo al leer un mensaje ante medios de comunicación.
Aseguró que el gobierno federal impulsará una política industrial para fortalecer el mercado interno, y que las pequeñas y medias empresas enfrenten los nuevos retos del acuerdo comercial entre Estados Unidos, México y Canadá.
Ebrard Casaubon, acompañado de Graciela Márquez, Jesús Seade, y Alejandra Frausto, designados para estar al frente de la Secretaría de Economía, jefe negociador del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), y la Secretaría de Cultura, respectivamente, dijo que las nuevas disposiciones pueden representar retos de adaptación para las empresas mexicanas, sobre todo las pequeñas y medianas (Pymes).
Es por ello que la nueva política industrial propuesta por el presidente electo de México buscará fortalecer el mercado interno a través de la capacitación y del capital humano, con tecnología de punta, de la mano del sector privado, subrayó en conferencia de prensa desde la casa de transición.
Reconoció que la culminación del proceso de renegociación del Acuerdo Estados Unidos, México y Canadá (USMCA, United States, México, Canadá Agreement, por sus siglas en inglés), como fue dado a conocer, propicia certidumbre en los mercados financieros, las inversiones y generará más empleos en nuestro país.
Refirió que el nuevo tratado comercial también ofrece la oportunidad de modernizar y diversificar el sector productivo del país, y permite mantener la competitividad de la industria manufacturera mexicana, además del acceso al mercado más grande en el mundo, con casi 500 millones de habitantes.
Reiteró que la renegociación abrió la posibilidad de actualizar el TLCAN con elementos que no estaban presentes o cambiaron sustancialmente en los últimos 24 años, cuando entró en vigor, incluyendo a la industria cultural.
“México necesita transitar hacia un modelo de competitividad basado en capital humano e implementación de tecnología de punta y en línea con los cambios tecnológicos recientes”, argumentó.
El futuro canciller reiteró que ello representa una oportunidad para el fortalecimiento del mercado interno y una apuesta al capital humano como ejes de desarrollo del país.
“Gracias a este acuerdo, México estará mejor posicionado para dar uso a los programas prioritarios planteados por el presiente electo”, insistió Ebrard Casaubon, quien acentuó que el país seguirá con el trabajo para mantener la relación bilateral con Estados Unidos y Canadá.
Precisó que el gobierno electo refrenda el compromiso de promover el crecimiento económico y mantener la estabilidad para mejorar las condiciones de vida de todos los mexicanos.
Luego de dar lectura al mensaje y al salir de la casa de transición, Ebrard Casaubon confirmó en entrevista que será el presidente Enrique Peña Nieto quien firme el documento.
También en entrevista en la casa de transición, Seade Kuri, quien fue designado como acompañante de la negociación por parte del equipo de transición, dijo que en términos definitivos, el TLCAN dará margen para que el gobierno pueda apoyar a las Pymes, aunque descartó lo dicho antes por Ebrard Casaubon en el sentido de que éstas enfrentarán retos.
En su conjunto, dijo, la zona se vuelve más proteccionista “y eso crea oportunidades para México, porque si se sube el tamaño de las bardas que la rodean y dentro está la economía más grande del mundo, los de fuera que quieran vender van a tener que invertir dentro de la región”.
En conclusión, México tiene que asumir una posición más abierta e inteligente para aprovechar las oportunidades que se presentan.
Explicó que la presencia de Canadá en la negociación permitió a México impulsar el tema de la industria cultural, que de otro modo no habría progresado y hoy se incluyó todo un anexo.
Aunque el tratado se revisará cada seis años, se ve muy difícil que algún país se pueda salir unilateralmente.
Seade Kuri explicó que el balance es muy bueno para México, aunque reiteró el respeto del próximo gobierno por la decisión que pueda tomar el Senado de la República al revisarlo y antes de su eventual ratificación.