Lesvia Gómez Entzin se negó a cortar unas manzanas para su suegra. Su esposo Jorge Navarro Hernández se enojó, sacó su escopeta calibre .410 y le disparó 2 veces en la cara.
La noche del 14 de julio de 2013, Jorge Navarro Hernández llegó borracho a su casa, en el municipio de La Merced, Amatenango del Valle, Chiapas, le pidió a Lesvia que cortara unas manzanas para su mamá, ella se negó porque llovía mucho en ese momento.
- “¡No sirves para nada, quieres un balazo!"- gritó Jorge.
- “No”- contestó Lesvia.
Al ver que su esposa no lo obedeció, Jorge fue por su escopeta y le disparó 2 veces en el lado izquierdo de la cara.
Los suegros de Lesvia se dieron cuenta de la gravedad de las heridas y la llevaron al Hospital de Las Culturas, en San Cristóbal de Las Casas, en Chiapas. Necesitaba atención especializada y la trasladaron al Hospital Regional de Tuxtla Gutiérrez, donde le realizaron varios estudios en sus ojos.
Lesvia sobrevivió a los disparos de escopeta, pero perdió la vista. A Lesvia le quitaron el ojo izquierdo y le diagnosticaron ceguera en el ojo derecho. La dieron de alta el 3 de agosto de 2013.
En México, 47% de las mujeres ha sufrido algún tipo de violencia por parte de su marido, según datos del Instituto Nacional de estadística y Geografía (INEGI).
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Lesvia regresó a vivir a la casa de sus suegros, quienes la cuidaron un mes con la intención de que declarara a favor de su esposo, quien ya estaba preso. Lesvia no quiso, sus suegros se enojaron con ella y la mandaron a casa de sus papás en la comunidad de Napité, en San Cristóbal de las Casas.
El caso de Lesvia llegó a los oídos de Patricia Chandomi, periodista y activista de Chiapas y formó el Comité Ciudadano Justicia para Lesvia.
El Comité se encargó de juntar recursos y vivieres para Lesvia y sus hijos de 5,3 y 1 año, pero la ayuda no duró mucho, pues se dieron cuenta que el papá y la mamá de Lesvia, Enrique Gómez López y Herlinda Entzín Pérez, no le daban lo recolectado.
Los activistas buscaron ayuda en la Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas del Gobierno Federal y consiguieron que trasladaran a Lesvia a la Ciudad de México en noviembre de 2013, para que examinaran su ojo derecho y les dijeran si en realidad había probabilidades de recuperar la vista.
Le realizaron 4 estudios en el Instituto Nacional de Rehabilitación, pero Lesvia no volvería a ver: le sacaron el ojo que le quedaba.
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Múltiples agresiones
No era la primera vez que Lesvia era agredida por su esposo. Durante los 5 años de matrimonio, Jorge la amenazó con dispararle cada vez que ella desobedecía sus órdenes. La noche del 14 de julio de 2014, la amenaza se hizo realidad.
La familia de Jorge fue la que lo denunció a las autoridades, pensaron que nada más sería un susto para que ya no maltratara a su esposa, pero las autoridades detuvieron a Jorge la noche del 15 de julio.
La policía encontró al agresor en la misma casa que le disparó a su esposa. El arma estaba escondida en la milpa de la misma propiedad.
Jorge fue encarcelado en el Centro de Reinserción Social para Sentenciados (CERSS) N° 14 “El Amate”. Actualmente se encuentra recluido en el CERSS N° 5 de San Cristóbal de Las Casas.
Los episodios de violencia para Lesvia no terminaron con el arresto de su esposo, pues sus papá y la familia de su esposo la siguen agrediendo emocional y económicamente.
Lesvia recibe la ayuda del programa Prospera, pero cada vez que va por el dinero la familia de su esposo la busca y le quita la mitad.
En la casa de sus papás, Lesvia sufre de golpizas e insultos de parte de su papá.
Lesvia está en rehabilitación, en proceso de aprendizaje para usar el bastón, para reconocer las voces.
La principal preocupación de Lesvia es su seguridad y la de sus hijos, teme que su esposo salga de la cárcel y busque venganza. “Que no salga de la cárcel, porque yo estoy sufriendo, ya me quitaron los ojos”.
"Él, aunque está encerrado, mira el amanecer; él puede ver la noche y yo no puedo ver nada”.