Asia Press, agencia informativa asiática, informa que en Corea del Norte algunos padres fueron acusados de comerse a sus hijos debido a la hambruna en el país.
Se agrega otro caso, en el que un abuelo tuvo que desenterrar los restos mortales de su nieto para devorarlos.
Otro reporte habla de hombres que hirvieron a sus hijos para después comérselos.
El dramatismo es centrado en Hwanghae del Norte y del Sur, donde se menciona que hasta 10 mil personas han muerto por la escasez de alimentos.
“Mientras su esposa estaba fuera de su casa, (el esposo) mató a su hija mayor y, como su hijo menor lo vio, también lo mató a él. Cuando la mujer regresó a su casa, le ofreció la comida diciendo: ‘Tenemos carne’”, relató un corresponsal.
Con información de Vanguardia.