Ciudad de México, a 27 de enero. El vocero de la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México (FGJCDMX), Ulises Lara, informó que el accidente ocurrido en la Línea 3 del Metro capitalino fue causado por una quema y corte doloso de cables eléctricos, además de la negligencia del conductor a cargo del tren número 24.
“El accidente fue producto de dos causas, la primera la quema y corte de doloso de los cables que contienen cableado eléctrico en la estación Potrero y el segundo la conducción negligente del tren número 24 que no respetó las medidas de seguridad,” apuntó.
Asimismo, señaló que el día 6 de enero ya se había reportado una falla en la señalización del túnel, la cual se encarga de regular los avances de los trenes, por lo que se había solicitado la presencia de equipo de mantenimiento.
Conclusiones
En sus conclusiones, “se determinan como dolosos los actos realizados en los registros de conexión de cableado eléctrico, que mediante el uso de fuego y herramientas, afectaron gravemente el suministro de energía, comunicaciones, señalización y pilotajes automáticos, que pusieron en riesgo la operación de la Línea 3 del Metro en ambas vías del tramo correspondiente entre las estaciones Indios Verdes - La Raza, por lo que se inició una carpeta de investigación por el delito de daño doloso a vías de comunicación en contra de quien resulte imputable”.
Cabe señalar que —agregó la FGJCDMX— lo anterior puede derivar en el delito de sabotaje, que se establece en el Código Penal bajo el que se rige esta Ciudad y consiste en dañar, destruir o entorpecer las vías de comunicación; y/o dañar o destruir instalaciones de servicios públicos, por lo que esta Fiscalía continuará investigando los hechos como daño doloso a sistemas de seguridad para encontrar a los responsables, sean internos o externos a la institución.
Además, “el conductor del tren 24 no se apegó a los lineamientos contenidos en sus manuales técnicos. Excedió el límite de velocidad en Conducción Manual Restringida (CMR) y cambió a conducción en Pilotaje Automático, cuando está prohibido en marcha de seguridad. No se comunicó en ningún momento al Puesto de Control Central (PCC) para notificar el cambio de tipo de conducción y no realizó ninguna maniobra para detener el tren y evitar el hecho”.
Por lo anterior, se procedió a la judicialización y cumplimentación de la orden de aprehensión por la posible comisión de los delitos de homicidio y lesiones, ambos culposos, en contra de Carlos Alfredo “N”, conductor del tren 24.
En cuanto al hecho descrito, concluyó la dependencia, “en torno a la caja negra, se actualizó la posible comisión del delito de ejercicio ilegal del servicio público, por lo que se ha solicitado al juez de control se cite a audiencia inicial al probable responsable”.