El fallecido gobernador de Puebla deja dos herencias en una: la de un político profesional comprometido, progresista y defensor de las mejores causas; y la de un ciudadano en lucha constante por lograr mayores beneficios sociales.
A lo largo de sus poco más de 24 años de trayectoria política, Luis Miguel Gerónimo Barbosa Huerta (1959-2022) dejó constancia de ser un hombre íntegro, de convicciones firmes, dispuesto a la interlocución, el diálogo y la conciliación con sus compañeros de partido o de otras organizaciones políticas.
En el desempeño de sus actividades como líder social, en las organizaciones donde militó y en el desempeño de sus cargos de representación popular, la historia del fallecido gobernador poblano se distinguió por impulsar iniciativas y proyectos a favor de causas sociales que trajeran mejores condiciones de vida para los sectores de la población más desfavorecidos.
Desde el inicio en su carrera política como dirigente estatal del Partido de la Revolución Democrática (PRD) en Puebla, en 1998, hasta sus actividades como diputado federal, senador y coordinador de su fracción en la cámara alta, presidente del Senado y gobernador, Barbosa Huerta mostró sus capacidades de liderazgo, que acompañó con una disposición continua a sumar esfuerzos para alcanzar objetivos comunes.
En los cuatro años que ejerció como gobernador de Puebla puso en marcha un proyecto innovador para atender las necesidades más apremiantes de la población e impulsó acciones para lograr un mayor bienestar de los ciudadanos, como el mejoramiento de la seguridad, el fomento a la competitividad y el combate a la corrupción, además de establecer condiciones para garantizar los derechos sociales y económicos en la entidad.
Apenas el 7 de diciembre lanzó un mensaje de optimismo y compromiso de gobierno: “Mi obligación es servir a las y los poblanos; así entiendo mi cargo como gobernador y siempre actúo de buena fe, con la convicción de que el servicio público debe funcionar para bien de la gente”.
Miguel Barbosa deja un legado de político profesional comprometido, progresista y defensor de las mejores causas sociales; y como persona deja constancia de una lucha permanente por mejorar la situación de los más desprotegidos.
Como esposo y padre formó un entorno familiar que lo acompañó siempre en los azarosos e inesperados caminos de la política; de su compañera e hijos recibió afecto y consuelo en los momentos más difíciles de su enfermedad; y un apoyo incondicional toda su vida.
Trayectoria partidista
Barbosa Huerta nació el 30 de septiembre de 1959 en Zinacatepec, Puebla. Fue el tercero de cinco hijos y los diez primeros años de su vida los pasó en su pueblo natal, hasta que sus padres se trasladaron al municipio de Tehuacán, donde estudió la preparatoria en el Centro Escolar Venustiano Carranza.
Más tarde se trasladó a la Ciudad de México para continuar sus estudios universitarios. De 1979 a 1983 cursó la licenciatura de Derecho en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Inició su carrera política en los años noventa del siglo XX. En 1994 ingresó como miembro activo del PRD; en 1998 fue designado consejero nacional perredista. Ese año logró su primer cargo de importancia al ser electo para encabezar la presidencia estatal del PRD en Puebla.
Tras ese cargo ascendió en el escalafón partidista y fue diputado plurinominal del PRD en 2000-2003.
Como legislador federal se desempeñó como secretario de la Mesa Directiva de la Comisión Permanente; fue secretario de la Comisión de Gobernación y Seguridad Pública; y del Comité del Centro de Estudios de Derecho e Investigaciones Parlamentarias. También formó parte de las comisiones de Marina y Reglamentos y Prácticas Parlamentarias.
Durante su gestión como diputado federal Miguel Barbosa fue el primero en proponer una Ley de Acceso a la Transparencia e Información Pública y sobresalió por ser el legislador con el mayor número de intervenciones en tribuna, con más iniciativas y puntos de acuerdo presentados.
En el periodo 2003-2004 fue secretario general de la Comisión de Garantías y Vigilancia del PRD, mientras que de 2005 a 2008 se desempeñó como secretario general de Asuntos Legislativos del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) perredista.
Fungió en 2008 como coordinador nacional de Nueva Izquierda, un movimiento surgido dentro del PRD y fundado por Jesús Ortega y Jesús Zambrano, que se definió como una instancia de izquierda socialdemócrata dentro del partido.
En 2016 Miguel Barbosa formó parte del movimiento Militantes de Izquierda (MIZ), un nuevo frente al interior del PRD que buscaba recuperar la unidad de las izquierdas para ir en 2018 con un solo candidato presidencial y que mostraba preocupación por la amenaza de la existencia y viabilidad del partido.
“El PRD ha dejado de ser una opción real y no se diferencia de las propuestas políticas de otros partidos”, señaló entonces.
Gobernador
En 2012 el PRD lo eligió en el primer lugar de la lista nacional al Senado, a donde llegó por la vía plurinominal. En agosto de aquel año fue designado por sus compañeros de fracción como coordinador parlamentario del PRD.
Ocupó la presidencia del Instituto Belisario Domínguez y como coordinador legislativo destacó en la construcción de acuerdos para la aprobación de importantes reformas para el país.
Fungió como presidente de la Mesa Directiva del Senado de la República del 1 de septiembre de 2014 al 31 de agosto de 2015.
Luego de romper con el PRD, en octubre de 2017 Morena nombró a Barbosa Huerta como su coordinador organizacional en Puebla. Un año después lo designó como su candidato a la gubernatura por la coalición Juntos Haremos Historia para las elecciones estatales de 2018.
Debido al fallecimiento de la gobernadora se convocó a elecciones extraordinarias en 2019. Miguel Barbosa volvió a ser candidato y ganó para encabezar el gobierno estatal en el periodo 2019-2024.
Gobierno de progreso
En su toma de posesión el 1 de agosto de 2019, Barbosa ofreció gobernar para todos los sectores de la sociedad poblana, a fin de fortalecer el bienestar de las familias.
Destacó entonces que el desarrollo económico sería una de las prioridades de su administración, ya que si hay inversiones también se generan empleos y riqueza, aunque esta última debe ser ajena a la corrupción: “Seré aliado de la iniciativa privada, impulsor de la productividad, respetuoso de la libre empresa y vigilante de que la creación de riqueza sea por mecanismos lícitos”, manifestó ante el Congreso del estado.
Se comprometió a trabajar para devolverle a Puebla la seguridad y la paz que se perdieron en los últimos años y reafirmó que gobernaría para “los desposeídos, la clase media y de la de altos ingresos (…), para todos los poblanos con propuestas que busquen la equidad, el equilibrio y la igualdad para todas y todos”.
En el Plan Estatal de Desarrollo 2019-2024, al que puso el título Hacer historia. Hacer futuro, expuso que su administración representaba un cambio de régimen en Puebla, ya que la expresión de la Cuarta Transformación en el estado se basaba en una política que buscaba fortalecer los valores y atender las necesidades más apremiantes de sus habitantes.
Resaltó que el progreso necesita estar ligado al bienestar de la sociedad, a garantizar la seguridad de sus ciudadanos, a vincular a todos los sectores sociales, a fomentar la inclusión y la competitividad con nuevas oportunidades apegadas a la ley.
Y se manifestó a favor de promover un esquema de gobernanza con base en la honestidad y que al mismo tiempo sea confiable, efectivo, abierto y de igualdad sustantiva para todos, para permitir un cambio político y social cercano a la gente.
Desarrollo económico y rural
Para Miguel Barbosa era un compromiso especial que los poblanos recuperaran la confianza en el actuar gubernamental; y uno de los aspectos fundamentales era el combate a la corrupción: permitir un mejor desarrollo económico y rural generaría tranquilidad, seguridad y paz en la sociedad.
“Lo anterior permitirá garantizar las condiciones apropiadas para beneficio de la población, garantizando los derechos sociales y económicos de los habitantes; haciendo notar que la entidad cuenta con un futuro prometedor para generar mejores oportunidades y condiciones de vida. Es tiempo de gobernar para todos, dirigiendo a Puebla con un modelo de planeación democrática que suma las propuestas y responde a las necesidades de los poblanos”, dijo al asumir la gubernatura.
Optimista acerca de los alcances de su gobierno, aseguró que la proyección para ver a Puebla en el futuro era el reflejo de una ambiciosa aspiración de desarrollo para la entidad, con fundamento en un desarrollo regional e incluyente, para propiciar las condiciones que generen un entorno de igualdad de derechos entre toda la población. “En Puebla se vive un gobierno progresista y con rostro humano, que es cercano a su gente y que promueve la participación ciudadana; que está comprometido con la sociedad, siendo honesto y transparente en su actuar gubernamental”.
Su objetivo declarado era impulsar proyectos estratégicos incluyentes para conducir a Puebla a la transformación del país con una administración que tuviera propósitos de equidad y de equilibrio, con respeto a los órdenes de gobierno y trabajo coordinado con los ayuntamientos, así como una visión a largo plazo.
Defensor de ideales
En reconocimiento a su trayectoria de líder social y destacada carrera política de hombre de izquierda progresista, el presidente Andrés Manuel López Obrador presidió el homenaje póstumo al gobernador Miguel Barbosa en Casa Aguayo, sede del gobierno de Puebla.
El mandatario afirmó que Barbosa Huerta hizo un buen gobierno, puesto que trabajó por los poblanos y enalteció el movimiento de la 4T.
Ante la presencia de la esposa del gobernador, Rosario Orozco Caballero; sus hijos Rosario y Miguel; familiares, mandatarios estatales, integrantes de los gabinetes federal y estatal; y representantes de partidos políticos a nivel nacional, López Obrador reconoció al extinto gobernador por defender siempre los ideales de izquierda y apoyar sin simulaciones la causa de la actual administración federal de combate a la corrupción y trabajar por los más necesitados.
Dijo que fue un gran compañero de lucha y un gobernante con el que siempre disfrutó trabajar e impulsar acciones para beneficio de la población.
Aseveró que Barbosa fue el primero en hablar de una movilización a favor de la 4T, por lo que esa iniciativa demostró que siempre estuvo del lado del pueblo y la izquierda.
Tras resaltar la figura del fallecido gobernador y acompañado por los secretarios de Gobernación, Adán Augusto López; de la Defensa Nacional, general Luis Cresencio Sandoval; y de la Marina, almirante Rafael Ojeda Durán, el presidente montó una guardia de honor junto al féretro.
Padre, esposo y amigo
La esposa del gobernador Barbosa, Rosario Orozco, dijo a su vez que desde que tomó protesta él estuvo siempre preocupado por cumplir la ley a cabalidad, combatir la corrupción de una manera contundente y poner en primer lugar el bienestar de los poblanos.
Aseveró que fue el primer gobernante de la entidad en apoyar realmente al campo, así como a otros sectores de la sociedad que fueron olvidados en el pasado.
Describió al gobernador como un gran padre, esposo y amigo. Dijo que Barbosa Huerta siempre estuvo agradecido con la gente por la oportunidad que le dieron para gobernar Puebla.
Al homenaje asistieron la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum Pardo, y los gobernadores de Guerrero, Evelyn Salgado Pineda; Quintana Roo, Mara Lezama; Tamaulipas, Américo Villarreal Anaya; Sonora, Alfredo Durazo Montaño; Oaxaca, Salomón Jara Cruz; Sinaloa, Rubén Rocha Moya; y Zacatecas, David Monreal Ávila.
También estuvieron presente los secretarios federales de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard; Energía, Rocío Nahle; Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez Velázquez; Bienestar, Ariadna Montiel Reyes; Trabajo, María Luisa Alcalde Luján; Educación Pública, Leticia Ramírez Anaya; Medio Ambiente y Recursos Naturales, María Luisa Albores; y Economía, Raquel Buenrostro Sánchez. Además, los directores generales del IMSS y la CFE, Zoé Robledo y Manuel Bartlett.
En el Senado de la República se le rindió homenaje y el pleno guardó un minuto de silencio en su honor como integrante de la cámara alta en dos legislaturas.
Su legado y trayectoria destacan por enaltecer el trabajo de la política, pues fue consciente de que esa actividad es fundamental para el beneficio de la población y la buena marcha de un gobierno.
En los poco más de 24 años que se dedicó al activismo social, a la vida partidista, como diputado federal, senador y líder de su bancada en la cámara alta, el fallecido gobernador de Puebla demostró en los hechos su compromiso con los acuerdos, el diálogo y la negociación.
En todas estas tareas Miguel Barbosa Huerta obtuvo el reconocimiento de compañeros de todas las fuerzas políticas, quienes constataron su calidad humana y la fortaleza de sus convicciones, que lo llevaron a desempeñar con honestidad y transparencia las responsabilidades que le tocaron ejercer. Descanse en paz.
Trayectoria
En 1998 fue designado consejero nacional perredista. Ese año logró su primer cargo de importancia al ser electo para encabezar la presidencia estatal del PRD en Puebla.
Fue diputado plurinominal del PRD en 2000-2003.
En el periodo 2003-2004 fue secretario general de la Comisión de Garantías y Vigilancia del PRD.
De 2005 a 2008 se desempeñó como secretario general de Asuntos Legislativos del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) perredista.
En 2008 fue coordinador nacional de Nueva Izquierda, movimiento interno del PRD.
Formó parte en 2016 del movimiento Militantes de Izquierda, que buscaba recuperar la unidad de las izquierdas.
En 2012-2018 fue senador plurinominal por el PRD.
Presidente de la Mesa Directiva del Senado del 1 de septiembre de 2014 al 31 de agosto de 2015.
Al romper con el PRD, Morena lo nombró en octubre de 2017 coordinador organizacional en Puebla.
El 1 de agosto de 2019 asumió la gubernatura de Puebla.