El Senado aprobó una reforma a la Ley Federal del Trabajo para ampliar el periodo de lactancia de seis meses a dos años, a fin de garantizar el derecho humano a la maternidad en el ámbito laboral, evitar despidos de las mamás trabajadoras, así como ampliar los derechos que protegen a las y los niños, en materia de nutrición y alimentación.
Con estas modificaciones, se amplían las garantías de las trabajadoras, además de que se regulan los derechos de parentalidad de mujeres y hombres, para reconocer la importancia compartida en el cuidado de los recién nacidos.
Dentro de las disposiciones se platea que, en dicho periodo, podrán solicitar flexibilidad de su horario laboral, y en casos extraordinarios llevar a sus hijos al centro de trabajo, siempre que no se pongan en riesgo la integridad de los menores, y previo acuerdo con el patrón.
Por su parte, los patrones tienen que garantizar espacios dignos, adecuados, privados, higiénicos, dignos y accesibles, para la lactancia.
También se podrán sentar las bases para que tanto las mujeres como los hombres ejerzan con plenitud su maternidad y paternidad.
Además, el proyecto evitará acciones negativas, como el despido de trabajadoras en ese periodo, lo que implicaría una discriminación por razón de género y una violencia laboral que las coloca en estado de vulnerabilidad.
Los legisladores consideraron que la promoción de la lactancia materna en el trabajo puede incrementar la eficiencia y productividad y, a su vez, reducir el ausentismo, ya que, entre otras cosas, las mujeres que lactan suelen faltar menos al trabajo debido a que sus bebés se enferman menos.