La presidenta de la Mesa Directiva del Congreso de la Ciudad de México, Gabriela Salido Magos, solicitó la intervención de la Suprema Corte de Justicia para resolver, en definitiva, el juicio que desde hace 32 años se lleva sobre casi cinco hectáreas de la Tercera Sección del Boque de Chapultepec y que ahora un Juez de Distrito, en materia Administrativa, ordena el cambio del uso de suelo para edificar vivienda.
“Hoy el proceso legal y el tiempo nos han alcanzado, y es justamente en este Tercer Año de la Segunda Legislatura del Congreso de esta ciudad que tengo el honor de presidir, que nos ha llegado un ultimátum por parte del poder judicial, donde se nos dice que sin mediar procedimiento alguno se efectúe el cambio de uso de suelo correspondiente”, precisó.
Explicó que la Presidencia de la Mesa Directiva, como la Junta de Coordinación Política, han realizado todas las gestiones para atender la solicitud del juez; sin embargo, consideran que aplicar la determinación tendrá un fuerte impacto en materia ambiental para las y los habitantes de la CDMX, por lo que se encuentran “entre la espada y la pared”
Explicó que las decisiones del Congreso son colegiadas y ella no puede tomar una determinación, de manera unilateral, al respecto u ordenar a los diputados que voten en un sentido sobre un dictamen.
“Aunque en mí recaiga la representación legal de este Poder, el cumplimento no está en mis manos, así, el juzgado de distrito que nos ordena el cumplimento señala que, de dilatar el cumplimiento, dará vista a las autoridades correspondiente dentro del poder judicial pudiendo llegar este asunto al conocimiento de la Suprema Corte de Justica y tener como consecuencia la destitución de las personas servidoras públicas involucradas”, destacó.
Por tal motivo, la legisladora hizo un llamado a la Suprema Corte para que en definitiva resuelva el conflicto legal y determine el cumplimiento de la resolución, pues la transformación de cinco hectáreas de bosque en una zona urbana, sin duda es una afectación grave a la sociedad.
“En caso de que la Suprema Corte no considere que la pérdida de una parte del Bosque de Chapultepec no es un daño grave a la sociedad y escoge el camino de las sanciones, asumiré mi destitución de esta Presidencia con la frente en alto, pues los argumentos en favor de la defensa de la Ciudad están dados y las convicciones firmes”, concluyó.