Ciudad de México, 22 de octubre. El día de hoy, la Cámara de Diputados discutirá la reforma al artículo 123.
En el encuentro se discutirán las facultades que tendrá el Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) para construir casas habitacionales. Esto es, discutir las atribuciones del instituto como constructora. Para ello se creará la figura del arrendamiento social que da un enfoque nuevo a la vivienda, en donde se le considera como un derecho humano y no como un bien sujeto a la especulación mercantil.
Alfonso Ramírez Cuellar, el vicecoordinador de los diputados de Morena, expuso que no habrá monopolio en la construcción de vivienda, sino que la ley establecerá las formas de participación de los empresarios y las desarrolladoras.
También señaló que, en los fondos de vivienda del Infonavit, Fovissste y cajas de ahorros del sindicato hay disponible casi un billón de pesos. El reto, dijo, estará en movilizar los recursos con el propósito de superar la meta de construcción de un millón de viviendas.
La diputada Dolores Padierna Luna, vicepresidenta de la Mesa Directiva, aseguró que esta discusión será de gran trascendencia para el avance de los derechos en materia de bienestar, ya que “discutiremos, y en su caso, aprobaremos la reforma al artículo 123 de la Constitución Política para facultar al Infonavit para construir viviendas”.
Asimismo, se establecerá que las personas trabajadoras después de cotizar un año ante el fondo de vivienda podrán acceder al arrendamiento social de vivienda propiedad del Infonavit, definiendo que en el arrendamiento la mensualidad no podrá́ ser superior al 30 % del salario de las personas trabajadoras.
De aprobarse la reforma, agregó, se otorgará el derecho de adquisición a las personas trabajadoras que hayan arrendado una vivienda por 10 años, dando preferencia de acceso a la vivienda social a las personas que hayan aportado continuamente al Fondo y no sean propietarias de una vivienda.
Dicha reforma constitucional, anotó, permitirá crear opciones accesibles para que las personas trabajadoras materialicen el derecho a una vivienda con características adecuadas y promotoras de su bienestar.
Asimismo, posibilitará una adecuada gestión de viviendas abandonadas, las cuales al ser recuperadas podrán otorgarse en arrendamiento.