Frente al avance vertiginoso de las tecnologías, las universidades deben defender a las humanidades, recuperar el valor fundamental que tienen para orientar las acciones que ayuden a resolver los problemas urgentes que hoy tenemos, coincidieron rectores de México y España.
El rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Leonardo Lomelí Vanegas, aseguró que hoy más que nunca, las humanidades son importantes para enfrentar la insatisfacción registrada en muchos países con las instituciones políticas y democráticas, para las cuales se plantean “salidas falsas”, que pueden poner en riesgo los avances en la construcción de sociedades más democráticas.
Al participar en la mesa redonda “FIL Pensamiento. La Universidad del Futuro”, en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, Lomelí Vanegas también indicó que otro de los grandes desafíos de estas instituciones es formar a sus estudiantes para hacer frente a problemas cada vez más complejos los cuales demandan propuestas de equipos inter y multidisciplinarios desde las ciencias sociales, las humanidades y las ciencias de la vida.
En su oportunidad, María Vicenta Mestre Escrivà, rectora de la Universidad de Valencia, sostuvo que las instituciones de educación superior deben adaptarse a los cambios vertiginosos que se presentan en la sociedad y en el acceso a la información, pero también trabajar en cómo se asimilan.
Además, consideró que deben continuar siendo fuente de la generación de conocimiento. “Las circunstancias sociales cambian, pero la misión es la misma”, remarcó al señalar que otra de sus misiones es formar buenos profesionales y de calidad.
Joan Guàrdia Olmos, rector de la Universidad de Barcelona, estimó que estas instituciones están en un “momento de tránsito”, que les exige ser capaces, atrevidos y valientes para ofrecer respuestas modernas al reto de definir nuevas formas de generar conocimiento y transmitirlo.
De igual forma, la presidenta de El Colegio de México, Silvia Giorguli Saucedo, puntualizó que las instituciones deben ser flexibles, por ejemplo, ante la urgencia de modificar sus planes de estudios y la necesidad de incorporar la tecnología en los procesos de enseñanza y la práctica docente, además de discutir cómo la tecnología ha cambiado los procesos cognitivos.