Ciudad de México, a 14 de agosto. Miguel Ángel Treviño Morales, detenido en 2013 en Nuevo Laredo, Tamaulipas, está preso en el Centro Federal de Readaptación Social Número Cuatro en Tepic, Nayarit.
Ante su posible extradición a Estados Unidos, ha solicitado públicamente a la presidenta Claudia Sheinbaum que no lo entregue, afirmando que su extradición sería un acto “incongruente e ilegal”, ya que, de acuerdo a como lo expresa en la misiva, es inocente.
“Nos tomó once años demostrar que no soy el Z40 y esta es una verdad legal establecida”, dijo Treviño Morales. Sus abogados aseguran que existen sentencias judiciales irrevocables que confirman que no es el líder criminal señalado.
Aunque los procesos de extradición están en fase de opinión judicial, Treviño Morales asegura que no hay pruebas que lo vinculen con los delitos que le imputan.
Las pruebas aportadas por la FGR incluyen la confirmación de que existe otra persona llamada Miguel Ángel Treviño, conocida como el Z40. Además, varios testigos protegidos que conocieron al verdadero Z40 han señalado que Treviño Morales no es esa persona, describiendo características físicas que no coinciden con las del acusado.
Caso
En el proceso penal 02/2008 del Juzgado Décimo de Distrito en Tamaulipas, Treviño Morales fue absuelto de los cargos, aunque las mismas pruebas y fotografías fueron usadas en la petición de extradición de Estados Unidos. Dicho país alega que las más de 10 toneladas de droga decomisadas en Altamira en 2007 estaban destinadas a su territorio.
Los especialistas en derecho afirman que hay dos argumentos clave para negar la extradición: Treviño Morales ya fue juzgado por los mismos hechos y no es la persona solicitada. Estos puntos están contemplados en la Ley de Extradición y en el Tratado de Extradición entre México y Estados Unidos.
Finalmente, la defensa destacó que en Estados Unidos existe un registro de una persona llamada Miguel Ángel Treviño Morales, alias Z40, actualmente detenida en el condado de Bexar, Texas. Asimismo, el Departamento de Estado estadounidense ha ofrecido una recompensa de 5 millones de dólares por información que conduzca a la captura del líder criminal.