Además de la complejidad que representan temas comunes como seguridad, drenaje, agua potable o movilidad, cada demarcación territorial enfrentará circunstancias sociales y políticas específicas.
Las elecciones del 2 de junio redefinieron el mapa político de la Ciudad de México, donde la oposición perdió el terreno que había ganado en 2021.
Así, los partidos aliados que conformaron la coalición Juntos Hacemos Historia, es decir, Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), el Partido del Trabajo (PT) y el Partido Verde (PVEM), ganaron en once demarcaciones, cuatro alcaldías más que en las pasadas elecciones.
Otras cinco quedaron en manos de la oposición, que integraron los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD).
Y el martes 1 de octubre los 16 alcaldes electos tomaron protesta ante el pleno del Congreso capitalino, frente a la presidenta de la Mesa Directiva, la morenista Martha Ávila Ventura.
Por orden alfabético, según las alcaldías, por la coalición Juntos Hacemos Historia rindieron protesta Nancy Núñez, electa en Azcapotzalco; Janecarlo Lozano, en Gustavo A. Madero; Lourdes Paz, en Iztacalco; Aleida Alavez, en Iztapalapa; Fernando Mercado, en Magdalena Contreras; Octavio Rivero, en Milpa Alta; Berenice Hernández, en Tláhuac; Gabriela Osorio, en Tlalpan; Evelyn Parra, en Venustiano Carranza; y Circe Camacho, en Xochimilco.
Debido a que la oposición perdió tres alcaldías del terreno que había ganado en 2021, solo tomaron protesta cinco alcaldes de la alianza PAN-PRI-PRD: Luis Mendoza, electo en Benito Juárez; Giovanni Gutiérrez, en Coyoacán; Carlos Orvañanos, en Cuajimalpa; Alessandra Rojo de la Vega, en Cuauhtémoc; y Mauricio Tabe, en Miguel Hidalgo.
Al dar la bienvenida a las nuevas alcaldesas y alcaldes la diputada local Ávila Ventura resaltó que el mandato que inician es fruto de una larga lucha histórica en la capital, ya que su condición jurídico constitucional durante los últimos dos siglos tuvo diversas limitaciones, pero gracias a las movilizaciones sociales y avances políticos actualmente los capitalinos pueden ejercer su soberanía a través de sus representantes locales.
La legisladora hizo énfasis en señalar que se debe gobernar para todos, ya que las alcaldías reflejan una voluntad diversa, y llamó a las alcaldesas y alcaldes a conducirse con probidad frente a las demandas ciudadanas y bajo el principio de proximidad gubernamental.
Finalmente, recordó que en el marco federal de la distribución de poderes y competencias en tres órdenes de gobierno existe la obligación de colaborar en forma respetuosa y eficaz para lograr el bien común y cumplir sus responsabilidades.
“La contienda ha quedado atrás y ahora deberán privilegiar el diálogo democrático. Hacemos un llamado a aplicar y favorecer en todo momento los principios de la buena administración y del buen gobierno”, puntualizó.
Desafíos
Para diversos analistas los retos más importantes que deberán enfrentar los nuevos alcaldes son sin duda la asignación del presupuesto, la seguridad, la gestión del agua y, para las demarcaciones de oposición, la relación con el gobierno capitalino.
Y es que, como señala Artemisa Montes Sylvan, directora ejecutiva del Observatorio Mexicano de la Crisis, uno de los desafíos que afrontarán los nuevos alcaldes de la capital será su relación y la negociación que tendrán con la nueva jefa de Gobierno, Clara Brugada.
Montes indica que las alcaldías buscarán tener mayor independencia y hacer alianzas con los concejales.
Asimismo, agrega, los alcaldes tendrán que negociar con la jefa de Gobierno y con el Congreso local los recursos para el próximo año.
En cuanto al tema del agua, cabe recordar que la crisis hídrica en la ciudad más poblada del mundo lleva décadas. A los problemas estructurales en el suministro, la desigualdad en el acceso, las fugas y la contaminación se han sumado récords de temperaturas máximas y una sequía que se ha extendido durante los últimos tres años y que golpea a todo el país.
De hecho, en la Ciudad de México suelen registrarse lluvias de 550 y 600 milímetros al año, pero se recicla apenas 15% del agua.
La megaurbe está construida sobre una red de lagos inmensos y aun así hace pocos años México batió el récord como el país que más compraba agua embotellada. Un conjunto de problemas y paradojas que está llevando al límite a una ciudad con más de 20 millones de habitantes.
En el caso de la seguridad, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) presentó en julio la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU), en la cual se muestra que la Ciudad de México alcanza niveles históricos positivos y favorables de percepción de seguridad desde que existe esta medición.
La percepción de inseguridad descendió entre los capitalinos a 51.5% en el segundo trimestre de 2024, el nivel más bajo registrado durante todo el sexenio.
El informe registra buenos niveles de percepción de seguridad en prácticamente todas las alcaldías, pero particularmente merece la pena resaltar los casos de Iztapalapa y Tlalpan, pues ganaron más de 20 puntos positivos durante el último trimestre.
Llama la atención que haya dos alcaldías que no siguen esta inercia.
El primer caso es el de la alcaldía Benito Juárez, donde la percepción de inseguridad subió 70% en el último trimestre de 2024. Los expertos señalan que una de las causas de este avance de la inseguridad se debe a la gentrificación que se registra en esta demarcación, donde cada día hay más negocios y, por ende, más blancos para la criminalidad.
La segunda alcaldía es Azcapotzalco, que subió 21 puntos porcentuales mientras que el promedio general de las otras 14 alcaldías tiende a la baja.
Particularidades
Además de la complejidad que cargan las alcaldías capitalinas en temas comunes como seguridad, drenaje, agua potable y movilidad, cada demarcación territorial enfrentará circunstancias sociales y políticas específicas.
En el caso de la Álvaro Obregón, por ejemplo, el morenista Javier López Casarín enfrenta un problema de falta de legitimidad, pues no solo la oposición sino también muchos en Morena lo catalogan como un “fraude” porque el Instituto Nacional Electoral (INE) determinó que rebasó el tope de gastos de campaña, aunque fue exonerado por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
López Casarín de todas formas enfrenta un conflicto penal latente, porque el rebase de tope de gastos de campaña es un delito y si en algún momento quedara firme la sentencia por rebase de tope de gastos de campaña tendrá que darse vista, de oficio, a la Fiscalía Especializada en Delitos Electorales (Fepade).
En Azcapotzalco, Nancy Núñez asume la alcaldía con el desafío de revertir los problemas que dejó el gobierno anterior de Margarita Saldaña.
Destacan entre los principales retos la crisis hídrica, la inseguridad y el crecimiento descontrolado del boom inmobiliario.
Núñez Reséndiz se comprometió a atacar estos problemas con una estrategia integral para devolver la estabilidad a la demarcación.
En Benito Juárez, Luis Alberto Mendoza Acevedo tiene dos problemas fundamentales. El primero es cerrar en definitiva toda la etapa del proceso penal que enfrentaron más de 30 funcionarios y exfuncionarios de la demarcación debido a lo que se ha denominado como “cartel inmobiliario” y que ellos acusan es una persecución contra la oposición. En este sentido, el nuevo alcalde debe poner orden entre los desarrolladores.
Pero el mayor problema es el deterioro que ha sufrido la Benito Juárez en los últimos diez meses, desde que se separó en definitiva Santiago Taboada y en su lugar quedó como sustituto Jaime Mata, quien no pudo preservar los avances que se habían logrado.
De ser percibida como la alcaldía más segura del país hasta enero pasado, según las encuestas del INEGI, en el primer semestre de 2024 la Benito Juárez cayó al quinto lugar. Esto en buena medida tiene que ver con que la gente, al ver un entorno descuidado, parques sucios, con obras a medias, oscuros, más baches y basura en las calles, registra una sensación de menor seguridad.
En Coyoacán, el alcalde reelecto Giovani Gutiérrez se fijó como prioridad combatir la venta de alcohol a menores. Su propuesta para regular las chelerías podría haberse unido a la iniciativa del jefe de Gobierno, Martí Batres, con el fin de fortalecer las medidas.
Durante su primer mandato Gutiérrez destacó por mejorar la calidad de vida en la alcaldía y en este nuevo periodo prometió seguir trabajando en el desarrollo urbano y la seguridad.
En Cuajimalpa de Morelos el panista Carlos Orvañanos Rea dejó claro en su discurso de arranque de gobierno cuáles son los dos temas más importantes en esa demarcación: la seguridad y la generación de un clima social de armonía, de reconciliación, después de que durante al menos la última década hubo una etapa hostil con su antecesor, Adrián Rubalcava, en los pueblos de esa histórica región de la capital del país, así como con la clase política, antes contra Morena, y después contra el PAN y el PRI.
Orvañanos dice que uno de sus objetivos es eliminar el llamado Cártel del Dragón o Familia Dragón, creado en el gobierno anterior por funcionarios y grupos de choque.
También destaca que eliminará el cuerpo de seguridad y vigilancia llamado Escudo Cuajimalpa, que lleva casi seis años en funcionamiento, a pesar de que quitar este modelo ya ha representado en algunos sectores el incremento de incidentes delictivos.
Alessandra Rojo de la Vega, en la Cuauhtémoc, libró una serie de ataques antes y después de la elección, pero finalmente ganó por una diferencia de más de once mil votos a favor.
Por su lado, Lourdes Paz, después de presentar al Concejo de la alcaldía Iztacalco, emitió un discurso de unidad en la demarcación y un llamado a los funcionarios para ser leales con la población gobernada.
Este discurso surgió en un contexto donde aparecen señalamientos a funcionarios que presuntamente buscaron crear redes de corrupción con panteones y cobros indebidos a giros indebidos, que deben pagar para evitar clausuras.
En Gustavo A. Madero, Janecarlo Lozano asumió el liderazgo de la demarcación enfrentando el legado de las administraciones pasadas, conocidas como las “parejas imperiales”.
Su gobierno, señala, pondrá énfasis en la seguridad, planeando triplicar el número de policías y la instalación de cámaras de vigilancia.
Además, se enfocará en mejorar los servicios urbanos, con campañas de bacheo y limpieza, así como en la construcción de clínicas para la mujer y un centro de convenciones que competiría con los principales espacios culturales de la capital.
En Magdalena Contreras, Fernando Mercado heredó una demarcación afectada por la inseguridad y denuncias de corrupción.
Mercado, quien ya había sido delegado, ofrece enfrentar estos problemas y trabajó en la reconstrucción de la confianza ciudadana. Su experiencia como funcionario público es clave para implementar soluciones efectivas.
En Venustiano Carranza, Evelyn Parra promete a su vez gobernar con cercanía y resultados tangibles. Entre sus planes destacan la construcción de una clínica de atención al sobrepeso, el primer hospital veterinario de la demarcación y la instalación de paneles solares para reducir los costos de energía eléctrica de los vecinos.
Con estos proyectos, Parra Álvarez buscó consolidar a Venustiano Carranza como una alcaldía innovadora y sustentable.
El nuevo mapa político capitalino es una realidad.
Nuevos alcaldes de la CDMX
• Álvaro Obregón. Javier López Casarín (PVEM).
• Azcapotzalco. Nancy Marlene Núñez Reséndiz (Morena).
• Benito Juárez. Luis Mendoza Acevedo (PAN).
• Coyoacán. Giovani Gutiérrez Aguilar (PAN).
• Cuajimalpa. Carlos Orvañanos Rea (PAN).
• Cuauhtémoc. Alessandra Rojo de la Vega (PRI).
• Gustavo A. Madero. Janecarlo Lozano Reynoso (Morena).
• Iztacalco. Lourdes Paz Reyes (Morena).
• Iztapalapa. Aleida Alavez Ruiz (Morena).
• Magdalena Contreras. Fernando Mercado Guaida (Morena).
• Miguel Hidalgo. Mauricio Tabe Echartea (PAN).
• Milpa Alta. Octavio Rivero Villaseñor (Morena).
• Tláhuac. Berenice Hernández Calderón (Morena).
• Tlalpan. Gabriela Osorio Hernández (Morena).
• Venustiano Carranza. Evelyn Parra Álvarez (Morena).
• Xochimilco. Circe Camacho Bastida (PT).