Es la empresa de motocicletas líder en América Latina por la excelencia, seguridad, eficiencia e innovación en todos sus productos y refacciones.
Dos décadas ininterrumpidas en el mercado mexicano han posicionado a Italika como una de las principales compañías proveedoras de motocicletas a nivel nacional y en países de Centroamérica, con líneas de producción que entrelazan movilidad, economía familiar, apoyo de unidades a empresas, libertad personal y un entorno de Prosperidad Incluyente para sus millones de clientes y miles de colaboradores.
Durante estos cuatro lustros la firma ensambladora 100% nacional ha configurado todo un equipo en la elaboración de motocicletas donde directivos, ingenieros y técnicos mexicanos integran un conjunto de innovaciones originales en procesos de armado de estas unidades, que hoy permite a la compañía posicionarse como la mejor del ramo para los próximos 20 años.
Alberto Tanus Schwarz, director general de Italika y quien ha comandado los destinos de la compañía, ofrece una entrevista exclusiva con Vértigo en la que expone los mecanismos que benefician hasta el momento a más de nueve millones de clientes y hacen de la empresa la única del sector con un trabajo esencial: el apoyo en la posventa con servicio de calidad para sus consumidores; una prestación que la vuelve única en el mercado mexicano.
Durante la conversación Tanus pone en claro lo que significa la compañía para todos aquellos millones de personas que han hecho su vida, su modo de transporte y su negocio en dos ruedas: un deseo hecho realidad.
Libertad
Con motivo del 20 aniversario de la marca Tanus Schwarz expone lo que han significado para Italika estos años de arduo trabajo en la industria de las motos. “¿Qué significa? Puedo decir que miles de cosas. Millones de datos y anécdotas. Creo que lo más importante es el compromiso con nuestro país, nuestra gente, nuestro México. Porque lo que más ha representado en estos 20 años es el beneficio que hemos aportado a tanta gente que tiene necesidades de movilidad”.
Tanus describe que en el diseño de sus productos lo primordial es cómo cada motocicleta le cambia la vida a la gente: “Cómo a la gente la haces poder ser más productiva, ser más feliz. Y lo que vamos a ver este domingo: ser libres. El Festival por la Libertad que vamos a festejar el domingo 10 de noviembre está hecho para eso. Porque realmente lo que hemos hecho en 20 años es darle libertad a la gente”.
Expone que desde que se comenzó a diseñar el proyecto Italika se habló de libertad como parte fundamental del mercado al cual se iba a proveer.
“Siempre estuvimos hablando de libertad. De hecho, el logotipo tiene un ala; antes eran dos. Fue cambiando con el tiempo. Hoy tiene un ala y esa ala significa la libertad que te provee a ti la motocicleta. Entonces, ¿qué representa para mí? Más que para mí es lo que logramos transformar en tantas personas: sus vidas”, puntualiza.
Cada 60 segundos
El directivo ofrece algunos indicadores sobre cómo se conforma actualmente la compañía. “Somos una empresa que ensambla motocicletas aquí en México; nuestra moto es hecha aquí en México y está certificada. Hemos vendido más de nueve millones de Italikas. Es un número muy relevante, de los cuales ensamblamos las motos hace 16 años en Toluca”.
Explica que en Toluca se tienen seis líneas de producción. “Cada línea de producción te saca una moto cada 60 segundos. Entonces, cada 60 segundos tienes seis motos nuevecitas. Es un proceso bastante eficiente y estamos muy contentos por inaugurar formalmente nuestra nueva planta en Guadalajara. Es nuestra segunda planta. Habrá dos líneas de producción, para que tengamos en total ocho”.
Señala que su canal de ventas más importante son las tiendas Elektra, con más de mil puntos de venta. “Pero también son muy importante las ventas que tenemos en nuestra red de distribuidores. Hemos hecho una construcción que andamos por ahí de mil puntos de venta de distribución. Y también todos los canales de autoservicio, que es algo innovador que hicimos”.
Advierte que Italika siempre ha sido una marca innovadora y siempre se hacen cosas diferentes. “Antes decían: ‘¿Cómo comprar una moto en un Walmart? Era como raro. Y desde hace años venden motos en Walmart y en Chedraui. Son canales de distribución muy importantes para nosotros, que nos permiten seguir con esta misión de darle libertad y acceso a la gente con la movilidad”.
Alberto Tanus describe algo esencial de la empresa: el servicio posventa. “Tenemos más de mil centros de servicio en toda la República, que es una parte fundamental de la empresa. Muchas marcas no tienen esta huella de servicio posventa. Porque es muy fácil encantar a la gente y venderle, pero lo relevante es tener la capacidad para recibirlas y darles servicio para que pueda seguir funcionando su herramienta de trabajo”.
Agrega que la empresa es muy cuidadosa en surtir las refacciones al ser una compañía que tiene todo el compromiso de siempre hacerle accesible las piezas necesarias a sus clientes para que sus motocicletas sigan teniendo un buen funcionamiento.
Establece al respecto: “Esa es la parte difícil, la más compleja, de las marcas. Y no todas hacen las inversiones y los esfuerzos necesarios para asegurar que haya refacciones en toda esta red de servicio. ¿Y por qué me importa tanto realmente? Porque, insisto, lo que queremos es dar este mensaje de libertad. No somos una marca que esté buscando que la gente maneje una moto de alto desempeño. Lo que tenemos en mente es su trabajo, su sustento, su actividad diaria: todo eso depende de nosotros y lo entendemos así. De nosotros depende que el señor pueda tener un buen día en su trabajo y tenga un desempeño exitoso para llevar el sustento a su casa”.
Beneficios
—¿A qué tipo de clientes van dirigidas las líneas de producción de la compañía?
—Nos dirigimos a los millones de mexicanos que tienen una necesidad de movilidad. Realmente nos dirigimos a todos aquellos que encuentran en la motocicleta una solución a sus necesidades y que los hacen más productivos. Todo mundo piensa en la Ciudad de México y piensa que por el tráfico la moto es muy eficiente; y es cierto, eso es algo muy importante en nuestras ventas. Si andas en moto vas a acumular 25 días al año de ahorro en tiempo para ti. Es decir, aquí es muy relevante porque te ganas casi un mes de vida en lugar de estar perdiendo tiempo en el tráfico con el transporte público.
Añade que no se puede dejar de lado que nuestro país es enorme en territorio y en diversidad y en todos estos poblados medianos y pequeños el uso de la moto es fundamental.
Precisa en este sentido: “La orografía, el territorio, el terreno y las distancias hacen que la moto te permita mover de un pequeño poblado a otro de una forma muy eficiente. Hemos permitido que mucha gente que se movía de aventón en estos largos recorridos de un poblado a otro, hoy lo haga con toda libertad y con toda seguridad de que su moto lo va a llevar de un lado a otro”.
—¿Qué beneficios sociales y ambientales visualiza Italika en un sector tan importante y en total crecimiento en el largo plazo?
—Los beneficios son muy altos. Considero que pudiéramos incluso hacer un estudio de cómo es que donde la gente tiene acceso a este medio de transporte se vuelve más productiva. El impacto de poderte mover con más eficiencia y libertad, creo que lo hemos subestimado en la economía de los estados y en las poblaciones donde simplemente le estás permitiendo a la gente moverse y hacer más. La motocicleta, una Italika, es un habilitador para la gente. Es una herramienta de trabajo, es un potenciador. Entonces, al ser un potenciador y una herramienta de trabajo y al darle más accesibilidad a la gente, pues les está dando oportunidad de que sea más productiva.
Por otro lado, señala, “la parte ambiental es muy relevante, sobre todo aquí en las grandes ciudades. Se ha confirmado que un automóvil tradicional, de los que vemos por todos lados, contamina muchísimo más de lo que contamina una motocicleta, simplemente por las dimensiones de los tanques de gasolina. Si tú ves el de una moto, es de doce o 14 litros y te dura 15 días; mientras que el de un vehículo es de 50 o 60 litros, pero te dura una semana”.
Tanus comenta que por más catalizadores y por más tecnología que tengan los coches, la cantidad de emisiones contaminantes del auto son mayores.
“Y la gran pena que a mí me da es ver que tantos coches —no sé si sea 80 o 90%— traen solo a una persona, cuando se trata de un vehículo que tiene capacidad para cuatro o cinco personas, e incluso más. Y lo que vemos es cuánto tiempo va el vehículo utilizado solo por una persona. Estás movilizando una cantidad de cosas que son muy contaminantes, que dañan la atmósfera, y a ello hay que sumar toda la contaminación que generó la producción de cada coche, de cada autoparte. Hay que pensar en la cantidad de contaminación que generó hacer una camioneta para que la señora vaya sola al salón de belleza”.
Por todo ello, asevera, “por donde lo veas la motocicleta te hace más eficiente, te hace más productivo, te hace sentirte libre y, además, estás colaborando a cuidar el medio ambiente al no generar tanta contaminación. Tenemos 50% menos contaminantes al tener todo un proceso de separar y reciclar los embalajes”.
Sector
—Italika se encuentra en los mercados de México, Guatemala y Honduras. ¿Hay planes de mayor expansión para la marca?
—Sí, tenemos presencia en los países que mencionas y sí tenemos idea e intención de mayor expansión. Ahora que hemos estado haciendo muchos viajes a Oriente, no solo a China, sino también a India, hemos estado en contacto con otras marcas de motocicletas, con distribuidores en otros países del mundo, y nos hemos dado cuenta de que hay mucho apetito por la marca Italika en mercados europeos. Por ejemplo, en el mercado turco u otros mercados de Europa del Este se acercan a nosotros y nos dicen: ‘Oye, me gustaría distribuir la marca Italika’. La verdad es que no lo habíamos dimensionado, pero ya vimos que hay un valor agregado porque la gente en el mundo nos está buscando y hemos empezado a considerarlo: vamos a poner a Italika en más lugares, para que más personas puedan movilizarse.
—¿Qué es lo que buscan esos clientes?
—Te lo digo muy fácil. Italika lo que logró es lo económico de los componentes, que se adquieren en grandes masas de Oriente, pero con un equipo de técnicos mexicanos e ingenieros en calidad que garantizan los más altos estándares de calidad en nuestros productos.
Explica que en Oriente se pueden lograr muy bajos costos, pero se debe tener mucho cuidado con el control de la calidad. “Italika ha encontrado muy bien ese punto de bajos costos con la posibilidad de gestionar la calidad. Y eso los distribuidores de motos lo entienden perfectamente. Por eso en algunas partes del mundo lo ven y dicen: ‘A ver, esta moto tiene muy bajo costo y muy buena calidad’. Esas son las cosas que estamos logrando”.
—La compañía forma parte de uno de los conglomerados empresariales más importantes del país. ¿Cómo ha incorporado Italika sus productos para generar Prosperidad Incluyente a sus clientes y colaboradores como principio esencial de Grupo Salinas?
—No solamente he escuchado la frase, sino que es la frase que aquí promovemos y va perfectamente de la mano con lo que te explicaba: lo que para mí representan estos 20 años, cómo le estamos dando un beneficio a la población, lo podemos resumir en esta frase: Italika es un promotor de la Prosperidad Incluyente. ¿Qué genera? Genera que nos vaya bien a todos. No solamente genera negocio en el grupo sino también permite que a los colaboradores les vaya bien. Nos hemos desarrollado, hemos crecido y lo más importante de todo es que los nueve millones de usuarios de Italika tienen una mejor vida. A eso es a lo que llamamos Prosperidad Incluyente. No solamente que los negocios sean exitosos, sino que la prosperidad de los negocios genere sustentablemente prosperidad en las comunidades y en los clientes que consumen los productos. Somos una empresa socialmente responsable. Tenemos el distintivo ESR por parte del Centro Mexicano para la Filantropía AC. Por más de una década estamos certificados.
—¿Cómo ve al sector? ¿Cuáles son sus pronósticos de crecimiento en México teniendo como referencia a países como India, China, Tailandia y Vietnam, con altos índices de uso de este medio de transporte?
—Tocas un punto clave, porque en México la cultura de la motocicleta todavía no madura. Por supuesto que Italika ha hecho mucho trabajo en esto, en culturizar al país en favor de la moto. Y me detengo un poquito en este concepto: culturizar, porque la moto es un habilitador que hay que saber utilizar; requiere de cultura y capacitación para sacarle su máximo potencial. Italika ha sido promotor de esa culturización, empezando por promover cursos de manejo y asegurarnos de que quien utilizará una motocicleta tenga el conocimiento para manejarla responsablemente y con seguridad.
Alberto Tanus pone como ejemplo que en la parte de los préstamos de Grupo Elektra y la gestión de cobranza todo individuo que se contrata para gestión de cobranza en una motocicleta Italika lo primero que debe hacer es asegurar que la persona sepa manejar de forma segura.
Y si no sabe, puntualiza, “la mandamos a ese lugar donde damos cursos para certificar que puede manejar. Y no solo certificamos para que pueda manejar, sino que estamos haciendo esta certificación de Train the trainers (modelo para capacitar a los capacitadores de las empresas) para que ellos también sepan entrenar”.
Explica: “Hablaste de Vietnam, hablaste de países de cultura de motociclismo de muchísimos años atrás. Aquí es una cultura que recién empieza y hay países donde ya empezó eso antes que nosotros y la tienen mucho más avanzada. A mí me gusta mucho dar el ejemplo de que hoy en México si una señora se apersona en un bautizo llegando en una moto dirían: ‘Qué aventada, anda en una moto’. Eso no es tener cultura de motociclismo. Vas a Barcelona y llegan las señoras en motocicleta y se suben y se bajan y se ponen su equipo y no pasa nada, es normal. ¿Por qué? Porque lo ven útil, porque les funciona”.
Afirma que todavía falta trabajar mucho en México. “Las vialidades, las calles… Tristemente nuestro país tiene un déficit terrible en sus calles, tiene coladeras abiertas, hoyos, baches. Creo que si todos participamos en conjunto para crear cultura y habilitar esto como un mecanismo de productividad estaremos mejor. ¿Y quiénes son los principales participantes? Las empresas de motos, los usuarios de las motos, aquellos que conducen en la movilidad que no usa moto, es decir, peatones, ciclistas, automovilistas y transporte público y el gobierno”.
—Con esta perspectiva de mercado, ¿hacia dónde Alberto Tanus perfila el crecimiento de Italika a corto plazo?
—¡Fortísimo! La verdad es que Italika todavía tiene planes de crecimiento muy relevantes. Somos una empresa, te puedo decir, llena de jóvenes. Una empresa que se caracteriza por ser juvenil. Y estamos llenos de ideas innovadoras, desde que nació Italika. Creció y se hizo grande porque hizo las cosas diferentes. El equipo que tenemos sigue haciendo cosas diferentes y seguiremos creando innovación y cosas distintas, no acostumbradas, para retar el statu quo que existe y encontrando éxito para poder tener crecimientos exponenciales.
A cuatro lustros de desempeño de la empresa, Alberto Tanus concluye: “El mensaje principal es el de gratitud. Decirles gracias a todos aquellos que han creído en nosotros. Gracias también a quienes no creyeron en nosotros, porque nos retaron y nos hicieron demostrar que sí había forma de hacerlo distinto. Pero a todos aquellos que creyeron en nosotros, llámense socios comerciales, la red de servicio que ha estado ahí desde el principio y nos ha apoyado, y a los clientes: muchas gracias por confiar en esta marca y por permitirnos cambiarles la vida a nueve millones de mexicanos, porque es lo que nos gusta hacer”.
Alberto Tanus
Cuenta con una amplia experiencia en el sector financiero y comercial. Como director general de Cobranza, Préstamos y Comercio de Banco Azteca, Italika y Presta Prenda, es responsable de la administración y dirección estratégica de estas empresas dentro de Grupo Salinas.
Su trayectoria en Grupo Salinas comenzó en septiembre de 2000.
Es fundador de Italika, ensambladora y comercializadora de motocicletas perteneciente a Grupo Salinas.
Bajo su liderazgo como director general Italika se convirtió en líder del mercado mexicano, alcanzando una participación de más de 60% del mercado.
ITALIKA Racing
Nace de la unión entre Italika y la Federación Latinoamericana de Motociclismo, creando una plataforma de formación y proyección internacional de pilotos de origen latino en el mundo del motociclismo de pista para mujeres y hombres.
En 2016 pone en funcionamiento la primera copa nacional monomarca con motocicletas Italika, creando dos categorías: Iniciación Infantil Y Juvenil.
El siguiente año apuesta por la inclusión del motociclismo femenino, creando la primera copa femenina internacional de la historia, recibiendo el reconocimiento del campeonato del mundo de motociclismo que otorgó el distintivo de programa de formación de nuevos talentos Road to motoGP por primera vez en Latinoamérica.
Actualmente Italika Racing es la plataforma deportiva más completa de Latinoamérica y un ejemplo internacional, ofreciendo a los pilotos una escalera de crecimiento deportivo que inicia en las categorías infantiles y juveniles nacionales y termina en los campeonatos del mundo femenino y masculino.