GOBIERNÍCOLAS HUNDEN AL PAÍS EN LA VIOLENCIA Y LA CORRUPCIÓN

“Errores, actos de corrupción y negligencias”.

Antonio Caporal
Nacional
GOBIERNÍCOLAS

Son presidentes municipales, gobernadores, secretarios de Estado, directores generales, directores de área, subdirectores, asesores…

Cuando en un país se registra un promedio diario de 90 asesinatos, cuatro secuestros, 30 asaltos a transporte de mercancías y cientos más a transeúntes; cuando el crimen organizado cobra “derecho de piso” a comerciantes y taxistas; cuando incluso ejecuta a funcionarios públicos, los culpables son, sin duda, los Gobiernícolas.

¿Los Gobiernícolas? Sí, los funcionarios públicos que cobran sus sueldos en las oficinas de los tres niveles de gobierno: federal, estatal y municipal.

Son presidentes municipales, gobernadores, secretarios de Estado, directores generales, directores de área, subdirectores y asesores.

Ese conjunto de empleados del gobierno, pagados con los impuestos de los contribuyentes, ha entregado en los últimos años pésimos resultados en las áreas de seguridad, salud, educación, conectividad, generación de empleo, creación de infraestructura, cuidado del ambiente y combate a la corrupción.

Su mediocre trabajo hace retroceder de manera significativa la eficiencia en la prestación de los servicios públicos. Por decirlo de manera coloquial, llevaron el ejercicio de gobierno a la era de los cavernícolas, cuando el cerebro de los humanos era muy pequeño y sus acciones eran producto de impulsos primitivos y sin razonamiento de lo que hacían.

La lista de yerros de los Gobiernícolas en los últimos años es larga. A veces se deben a su precaria formación académica; otras son por inexperiencia; en muchas ocasiones por ausencia de carácter; y, lo más criticable, por corrupción.

Estancados

Cuando en las encuestas se pregunta a la gente cuáles son los principales problemas del país, uno de los que resaltan es la corrupción; y México se encuentra “estancado” en materia de combate a este flagelo.

Transparencia Internacional y Transparencia Mexicana recién presentaron la edición 2023 del Índice de Percepción de la Corrupción (IPC). Este instrumento registra la opinión de especialistas, analistas de riesgo financiero, mujeres y hombres de la academia y los negocios sobre la situación que guarda la corrupción en cada uno de los 180 países evaluados.

Por cuarto año consecutivo, México mantuvo la misma calificación en el IPC: 31 puntos. La escala del IPC va de cero a 100, siendo 100 la mejor calificación posible. Con 31 puntos, México se ubica en la posición 126 de los 180 países evaluados por Transparencia Internacional.

México comparte puntuación con Kenia y Togo, con 31 puntos cada uno; además, entre el grupo de países que conforman la OCDE el nuestro se ubica en el último lugar; en tanto que en el Grupo de los 20 (G20), que integran las economías más grandes del mundo, se encuentra en la penúltima posición.

La organización expuso que “México no ha tenido cambios en su puntaje en el IPC a pesar de que la sociedad mexicana identifica a la corrupción como uno de los principales obstáculos para el desarrollo social y la reducción de las desigualdades”.

Asimismo, Transparencia Mexicana indicó que “ninguno de los grandes casos de corrupción ha llegado a sentencias definitivas. Ni la Estafa Maestra (con un desvío estimado en siete mil millones de pesos) o el caso Segalmex-Diconsa-Liconsa (con un desvío calculado en casi nueve mil 500 millones de pesos) han llegado a sentencias en firme. Casos de corrupción internacional, como el de Odebrecht, tampoco”.

Igualmente, reprochó que “aun cuando se abren cientos de carpetas de investigación por posibles actos de corrupción, las sanciones no llegan. Tampoco se han recuperado los activos desviados o se ha conducido una apropiada reparación de daño para las víctimas”.

Transparencia Mexicana criticó que “mientras que otros países investigan y sancionan la corrupción ocurrida, en México las autoridades siguen sin obtener sentencias firmes por los casos”.

Rosario de problemas

Otro de los grandes problemas que aquejan a la sociedad y que ha rebasado a los Gobiernícolas es la inseguridad.

La más reciente Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana elaborada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) refleja que la población en México se siente insegura.

El estudio señala que en diciembre de 2023 prácticamente 60% de la población de 18 años y más, residente en 75 ciudades de representación nacional, consideró inseguro vivir en su ciudad.

Lo anterior es producto de la violencia registrada en casi todas las entidades, las carreteras, los sitios turísticos y los centros agrícolas, entre otros lugares.

Los datos reflejan el grave problema: un promedio diario de 90 asesinatos, cuatro secuestros, 30 asaltos a transporte de mercancías y cientos más a transeúntes.

Además, el crimen organizado cobra “derecho de piso” a comerciantes y taxistas en todo el país, por lo que el delito de extorsión crece de manera desmedida.

Un estudio del Instituto Belisario Domínguez, del Senado de la República, revela que en México se cometen alrededor de 13 mil extorsiones cada día.

La ineficiencia de los Gobiernícolas se refleja en cada área del quehacer público; por ejemplo, en el tema del agua el gobierno carece de soluciones integrales para atender la actual crisis, y en la actualidad las presas del país se encuentran a menos de 50% de su capacidad; las ciudades de México y Guadalajara están muy cerca de padecer una crisis como la registrada en Monterrey hace unos meses, por la falta del líquido.

Otro problema irresuelto por los Gobiernícolas sobresale en el terreno de la salud. De acuerdo con un análisis del exsecretario de Salud, Julio Frenk, y la investigadora Felicia Knaul, entre otros expertos, “los indicadores de salud en México han mostrado un retroceso”.

Por ejemplo, señalan que hay un aumento de 30% en la mortalidad materna, mientras que se registra una disminución de 90% en las coberturas de vacunación.

La lista de errores, actos de corrupción y negligencias es larga. Y esto tiene a los tres niveles de gobierno en el país en la era de las cavernas.