El Día del Estudiante es más que una simple conmemoración; es un homenaje a la vitalidad, la creatividad y el compromiso de aquellos que dedican sus días al aprendizaje y al crecimiento personal. En México, se celebra el 23 de mayo, este día es una oportunidad para reconocer el papel fundamental que los estudiantes desempeñan en la sociedad. Desde las aulas hasta su entorno social, las y los estudiantes son agentes de cambio, que impulsan la innovación y forjan un mejor futuro con oportunidades equitativas e igualitarias.
A fin de que la educación sea una prioridad de todos, Silvia Ojeda, directora del Instituto Natura México menciona que, “las organizaciones, los gobiernos y la sociedad en su conjunto tienen la responsabilidad de garantizar el acceso equitativo a una educación de calidad, que nutra el potencial de cada estudiante y fomente la igualdad de oportunidades. Una sociedad educada es una sociedad empoderada, capaz de enfrentar los desafíos del mundo actual y construir un futuro próspero para las generaciones venideras”.
De acuerdo con la directiva, es vital contar con espacios en los que se promueva el diálogo constructivo con el fin de mejorar el sistema educativo. Ante esto, el pasado 8 de mayo se llevó a cabo la iniciativa “10 por la Educación”, la cual representa el consenso de diversas redes de la sociedad civil, convencidas que solo con la educación y la participación se podrá construir una ciudadanía preparada para enfrentar los retos del siglo XXI. Este movimiento surgió en 2012, en el marco del proceso electoral, para conocer las propuestas de los aspirantes presidenciales y promover sus compromisos en beneficio de la educación.
En este sentido, con el objetivo de conocer la visión y propuestas específicas de los candidatos a la Presidencia de la República sobre los principales retos de la educación en México, se destacó lo siguiente:
Xóchitl Gálvez señaló la falta de acción posterior a la pandemia en el ámbito educativo. Enfatizó la importancia de que las y los niños regresen a la escuela, considerándola como el centro de la comunidad, donde se deberían ofrecer actividades extracurriculares enfocadas en matemáticas y lectura. Además, abogó por la profesionalización de las y los maestros y por promover la lectura de manera activa. Propuso una estrategia integral que incluya la colaboración de maestros, padres, sociedad y académicos para fortalecer los aprendizajes fundamentales y se garantice el refuerzo del proceso educativo de las niñas y los niños.
Por su parte, el candidato Jorge Álvarez Máynez, resaltó la urgencia de replantear el modelo educativo y de enseñanza en México, así como, la necesidad de transformarlo en un programa donde las niñas y niños disfruten aprendiendo. Propuso abandonar el enfoque memorístico y apoyar un sistema educativo que fomente la creatividad y el pensamiento crítico. Asimismo, destacó la importancia de establecer escuelas inclusivas y equitativas, donde todos tengan acceso a una educación de calidad. En su visión, la esencia del cambio radica en la transformación del modelo educativo para adaptarse a las necesidades del siglo XXI.
Con el objetivo de seguir reflejando la voluntad y el compromiso con la Política de Aprendizajes Fundamentales de lectura, matemáticas y habilidades socioemocionales para garantizar el derecho a aprender de todas las niñas y niños, el Instituto Natura fungió como patrocinador de esta iniciativa.
Este esfuerzo suma al propósito de promover acciones que ayuden en la resolución de un problema fundamental que existe en nuestro país: uno de cada tres niños no cuenta con las competencias básicas de lectura y escritura al llegar al tercer grado de primaria. Actualmente, el Instituto Natura en alianza con otros promotores de la educación en México, ha contribuido a formar a 31,032 docentes de 7,829 escuelas, beneficiando a 620,791 estudiantes de primaria baja.