CIUDAD DE MÉXICO, abril 29.- La fiscalía general de la República descartó la presencia de crematorios en el rancho Izaguirre en el municipio de Teuchitlán, Jalisco que era utilizada por el Cártel Jalisco Nueva Generación como campo de reclutamiento y entrenamiento de sus integrantes.
Al presentar el primer informe el fiscal general, Alejandro Gertz Manero, afirmó que no se encontró “una sola prueba” que acredite que en ese predio hubo centros de cremación clandestinos y sólo se hallaron algunas zanjas donde se presume que hubo fogatas y una vasija donde se localizaron restos óseos.
Al explicar los hallazgos, indicó que tras los estudios que hizo la fiscalía federal y la Universidad Nacional Autónoma de México a la tierra, piedras y material de construcción recolectados en la finca “no encontraron niveles de calentamiento arriba de 200 grados” que avalen la existencia de crematorios, tal como informó un colectivo de buscadores de personas desaparecidas que denunció la existencia del centro.
El fiscal dijo en conferencia de prensa que está “absolutamente probado” que el predio era utilizado por el cártel como centro de reclutamiento, adiestramiento y operación desde 2021, según lo denunció en su momento la Comisión de Derechos Humanos del estado occidental de Jalisco a las autoridades del municipio de Teuchitlán.
Reiteró que en el lugar no se encontraron osamentas completas o parciales.