Ciudad de México, a 15 agosto. En la sesión de la Comisión de Investigación de la Guerra Sucia que se realiza en la Secretaría de Gobernación (Segob), los colectivos que dan seguimiento a estos hechos increparon y desconocieron el reporte de la Comisión para el Acceso a la Verdad, el Esclarecimiento Histórico y el Impulso a la Justicia de las Violaciones Graves a los Derechos Humanos Cometidas de 1965 a 1990.
Los inconformes están contra dicho reporte del mecanismo, el cual fue realizado por cuatro comisionados ciudadanos.
Estos versados en el tema, les echaron en cara que se abordaron hechos falsos, abarcaron otros sucesos y a supuestas víctimas; además, de no consultarlos y no preguntarles su opinión, lo que consideraron como un informe hecho a espaldas de las víctimas y de los colectivos.
Incluso, les reclamaron que es injusto que su informe lo hayan filtrado a los medios de comunicación y no a los integrantes de las organizaciones, lo cual derivo en que no podían dar una opinión del reporte.
Los comisionados Carlos Pérez Ricart y David Fernández Dávalos apenas se defendieron, ya que sólo se dedicaron a criticar la administración actual y no los hechos del pasado.
Los integrantes de los colectivos dejaron ver que este informe traduce los intereses del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez A.C. (Centro Prodh), y del Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan en una agenda antimilitar, enturbiando con ello una legítima búsqueda de la verdad en estos lamentables acontecimientos.
Ante esto destacan los representantes que no están en contra del presiente Andrés Manuel López Obrador ni de ninguna instancia del Gobierno de México, sino contra el actuar tendencioso de los cuatro comisionados ciudadanos.