Norma avanza hacia Sinaloa como tormenta tropical

No causó daños graves en Baja California Sur

Redacción
Nacional
Daños tras el huracán Norma en San José del Cabo, Baja California.
Foto: AP

Cabo San Lucas, Baja California, 22 de octubre. Norma, que tocó tierra el sábado en el extremo sur de la península de Baja California como huracán categoría 1, avanzaba el domingo hacia el México continental, hacia el estado de Sinaloa, donde se esperaban fuertes lluvias e inundaciones.

Las autoridades mexicanas no informaron de víctimas mortales en el estado de Baja California Sur, donde impactó el sábado, aunque el ciclón dejó daños menores provocados por los vientos y las fuertes lluvias y las inundaciones. Unas 70 mil personas seguían sin luz en el estado, indicó la Comisión Federal de Electricidad en un comunicado.

Mas de cinco mil marinos se habían desplegado en los estados afectados por el ciclón con barcos, camiones, helicópteros y ayuda de primera necesidad para atender cualquier emergencia que pudiera suscitarse, informó la Secretaría de Marina.

Según el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés), el domingo al mediodía Norma, que llegó a ser un huracán categoría 4, estaba 195 kilómetros (120 millas) al oeste de Culiacán y a unos 105 kilómetros (65 millas) al sur-suroeste de Los Mochis, las dos principales ciudades de Sinaloa. La tormenta se movía hacia el noreste a través del Golfo de California con vientos máximos sostenidos de 95 km/h (60 mph).

El NHC prevé que las fuertes lluvias de Norma seguirán impactando Sinaloa al menos hasta el lunes, y también algunas partes de la zona sur de Baja California con peligro de inundaciones y deslizamientos de tierra.

Las labores de limpieza comenzaron el domingo en Baja California Sur, mientras que los preparativos para la llegada de Norma se intensificaron en el estado de Sinaloa, donde el gobierno anunció el cierre de las escuelas para el lunes y se habían habilitado 120 albergues.

En las zonas turísticas de Los Cabos, donde no hubo daños mayores, los bomberos retiraban árboles y ramas caídas. Las autoridades locales sólo informaron de un turista argentino herido. Mientras tanto, los extranjeros volvían a pasear por el centro de Cabo San Lucas, algunos con la intención de marcharse.

“Nos dijeron que ya está abierta la terminal aérea y queremos regresar a San Diego, ya que pasó el peligro del huracán”, señaló el estadunidense Henry Brown mientras esperaba un taxi que le llevara a él y su esposa al aeropuerto de San José del Cabo, que reinició actividades por la mañana.

Brown reconoció que el viento estuvo muy fuerte el sábado, pero dijo que no tuvieron mayores problemas porque se quedaron resguardados en el hotel.

Otros, como el también estadunidense Noah Johnson y su familia, salieron a pasear para ver cómo había quedado la playa pero estaban dispuestos a continuar sus vacaciones a pesar de que muchos restaurantes y otros comercios permanecían cerrados.

A mediodía del domingo, la situación estaba un poco más complicada en La Paz, capital de Baja California Sur, donde habían caído lluvias torrenciales durante el sábado y el aeropuerto se mantenía cerrado.

Caudales de agua con troncos, tierra y basura cruzaban muchas de las carreteras con lo que varios accesos a la ciudad estaban bloqueados. Elementos de las fuerzas de seguridad hacían rondines en busca de personas que necesitaran ayuda.

En la bahía de la Paz, 400 personas procedentes de Sinaloa, que habían cruzado el Mar de Cortés en el transbordador que hace habitualmente esa ruta, permanecían en el barco a la espera de desembarcar porque la tormenta les agarró a bordo y el puerto se mantenía cerrado, dijo el almirante Santiago Jorge Morgado. comandante de la Cuarta Región Naval en La Paz.

Mientras tanto, en el Atlántico, las islas de Antigua y Barbuda salieron con pocos daños del paso del huracán Tammy gracias a un cambio tardío y repentino en su trayecto.

“Hasta donde yo sé, no ha habido daños significativos. Al menos llovió un poco. Puede que no sea mucha lluvia, pero es muy necesaria”, dijo el primer ministro Gaston Browne a The Associated Press.

Tammy impactó Bermuda la noche del sábado como huracán categoría 1 con fuertes lluvias y vientos de hasta 148 km/h (92 mph). La tormenta derribó algunas líneas eléctricas, provocó un apagón en toda la isla y causó daños menores a algunas viviendas. Sin embargo, no se reportaron daños de infraestructuras importantes.

Tammy recordó a los habitantes el impacto del huracán Irma, un ciclón de categoría 5 que arrasó Barbuda en 2017.

En Antigua sólo se reportaron unas pocas ramas y líneas de servicios públicos rotas.