ZELENSKI TENDRÁ TANQUES DE EU Y SUS ALIADOS

“Rusia intensifica la ofensiva”.

Claudia Luna Palencia
Internacional
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La empresa rusa FORES ofrece 71 mil dólares por cada blindado Leopard y Abrams que los soldados rusos destruyan o capturen en Ucrania, en un momento en que la guerra recrudece a pesar de la intensa nevada que tiñe de blanco al país invadido.

El 24 de febrero se cumplirá el primer año de la guerra de Vladimir Putin, esa que inició luego de que el mandatario ruso ordenó a sus tropas traspasar la frontera ucraniana y dar rienda suelta a una escalada bélica.

A esta guerra ya le han perdido el miedo tanto Estados Unidos como parte de sus aliados de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), que en la primera fase del conflicto mantuvieron una posición cauta, incluso temiendo una respuesta nuclear por parte del Kremlin.

Dicha postura ha ido evolucionando: de la ayuda técnica, militar, financiera, de espionaje e inteligencia proporcionada por EU, Reino Unido, Francia, Alemania, España y otros 25 países, el presidente Volodímir Zelenski ha presionado para pasar a obtener armas más potentes a fin de resistir la ofensiva.

Así, han sido enviados cohetes de largo alcance, lanzacohetes —algunos tan precisos como el M142 Himars— enviados por el Pentágono; obuses Howitzers; miles de cartuchos de munición; sistemas de defensa aérea; armas Nlaw; los famosos Javelin y otros misiles antitanques.

En su momento, el presidente Joe Biden llegó a declarar que EU ha dado a Ucrania “diez sistemas antitanques por cada tanque ruso” que está en territorio ucraniano.

También los aliados han dado al gobierno de Kiev multitud de lanzagranadas, chalecos antibalas, Kalashnikov, Jeep 4x4, visores nocturnos, equipo militar para el frío…

El gobierno polaco fue el primero en proporcionar más de 230 tanques pertenecientes a la etapa del Pacto de Varsovia entre Polonia y la República Checa; a su vez, los turcos han vendido a Zelenski muchos más drones Bayraktar TB2.

A las tropas ucranianas han llegado los NASAMS, sistemas de misiles de avanzada tierra-aire; otros sistemas de defensa aérea S-300 air; también radares de artillería, así como radares centinela y vehículos de soporte de combate blindado y blindados TOA.

En los últimos tres meses, previos al inminente invierno, Zelenski insistió denodadamente por que EU y sus aliados enviasen tanques modernos, los de la nueva era digital y no los viejos modelos soviéticos estacionados en países como Polonia y otros de Europa del Este, pertenecientes alguna vez a la confluencia soviética.

Reino Unido fue el primero en responder cediéndole a Kiev sus Challenger 2; sin embargo, la presión de Zelenski se encaminó hacia los Leopard 2: el tanque germano de larga data fabricado por vez primera a inicios de la década de 1970 por la empresa Krauss-Maffei-Wegmann.

Todavía Alemania estaba dividida en dos y la Guerra Fría en todo su apogeo. Esos blindados eran sobre todo para protegerse de la Alemania soviética (República Democrática de Alemania) y tras la unificación en 1989 siguieron fabricándose más modelos como el Leopard 2E y 2A. De acuerdo con el fabricante germano hay tres mil 450 Leopard vendidos en el mundo y dentro del espacio de la Unión Europea (UE) hay dos mil 405 distribuidos entre países fundamentalmente miembros de la OTAN.

Zelenski quiere juntar entre 300 a 500 tanques y carros de combate. Al final, Washington ha ido cediendo cada vez más a favor de entregar armas pesadas a las tropas ucranianas.

Hasta el general Lloyd Austin, líder del Pentágono, tuvo que convencer de forma arisca a su homólogo germano, Boris Pistorius, para que su país jugase un rol más decisivo para armar y pertrechar a Ucrania dándole parte de sus Leopard y concediendo el visto bueno para que los países que los tuvieran y quisieran darlos a Zelenski lo hicieran contando con el consentimiento germano.

¿Cuántos países acordaron dar Leopards a Zelenski? Hasta la fecha Alemania, Polonia, España, Finlandia, Noruega y Países Bajos.

Por ejemplo, España tiene 347 blindados de varios modelos: Leopard 2E tiene 239 y 108 de la versión 2A4, que son más antiguos.

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Tanto que la ministra de Defensa, Margarita Robles, se refirió a ellos señalando que estaban en un estado “deplorable”, casi inservibles.

El Ministerio de Defensa de España ordenó ponerlos a punto, repararlos si es necesario. En 1998 el país ibérico lanzó su Programa Leopard por 317 mil 709 millones de pesetas para adquirir 225 carros a la empresa alemana. Después de 2000 decidió adquirir otras versiones más actuales.

Un modelo A7 cuesta 8.5 millones de euros por unidad. Lleva un cañón L/55 de Rheinmetall y cuenta con tecnología moderna y una torreta FLW200 automatizada; entre otras ventajas alcanza una velocidad máxima de 68 kilómetros por hora y su cañón está dentro de los más efectivos porque puede penetrar 540 milímetros de acero a mil metros de distancia.

Para Jens Stoltenberg, cabeza de la OTAN, es prioritario que no se rompa la cohesión de los aliados en su apoyo a Ucrania, que si bien ha tenido sus más y sus menos entre los países miembros, hasta el momento continúa fluyendo.

“Tenemos que darle a Ucrania sistemas más pesados y más avanzados. Y debemos hacerlo más rápido para que puedan continuar con su ofensiva ante las tropas rusas”, señaló Stoltenberg en su más reciente visita a Berlín.

Notoriamente la postura germana es la que más ha variado respecto del conflicto y pasó de una prudencia inicial en la que pretendió no verse inmiscuida a favor de Ucrania, a tener que reducir sus compras de gas ruso y de petróleo hasta convertirse en uno de los máximos apoyos de Kiev y también de la OTAN.

Precisamente, Stoltenberg recordó que Alemania ha contribuido con un fondo de defensa especial de 100 mil millones de euros para aviones de quinta generación, más barcos, nuevos tanques y helicópteros para reforzar el flanco este de la OTAN.

Invierno endemoniado

La realidad es que a Ucrania muchos de esos tanques le llegarán entre finales de febrero, casi entrando la primavera. Contrario a lo que se esperaba, en el invierno a pesar de las enormes nevadas y de las inclemencias del tiempo el ejército ruso ha seguido avanzando para reforzar posiciones en la región de Donetsk; sin dejar de bombardear masivamente a las principales ciudades y a la capital.

Putin apuesta a que el tiempo termine minando la moral de los ucranianos y las tornas políticas podrían cambiar en los procesos electorales que se avecinan en varios países clave en el apoyo a Kiev, como es el caso de EU con Biden.

El mandatario ruso espera además un agotamiento de la opinión pública europea que llegue al extremo del hartazgo y el olvido del conflicto, para simplemente mirar a otro lado, mientras que esa opinión pública castigue en las urnas en EU a Biden por la cantidad de dinero gastado en ayudar a Ucrania este primer año de invasión: 47.9 mil millones de dólares, según el Council on Foreign Relations.

¿Cuánto podría alterar el curso de la guerra el envío de este material pesado con los tanques Leopard alemanes y los Abrams que dará EU? En opinión de Raúl González, experto del Instituto Minerva, nada o muy poco.

“Sinceramente no creo que con esta ayuda cambie el rumbo de la guerra en Ucrania. Los números de lo que hemos enviado hasta ahora, quitando artillería, son ínfimos. Y es cierto que han podido dar un pequeño respiro a Ucrania. Pero cuando Rusia pone toda la carne en el asador y tiene fondo para realizar ofensivas, estamos hablando de que los carros de combate con los que cuenta Rusia son miles y los Leopard que enviarán los países aquí en Europa son decenas, casi un promedio de 14 carros por país. No son cantidades suficientes”, reitera el experto militar.

Se usarán sobre todo, explica, para ayudar a las tropas ucranianas a enfrentar las embestidas que se dan en la plenitud de un duro invierno, cuando todo apunta a que Rusia estaría mucho más frenada por la misma situación de las nevadas.

“Han sido actuaciones más que nada del Grupo Wagner. La llegada de estos nuevos tanques no cambiará para los ucranianos las cosas, no al menos hasta bien entrada la primavera”, apunta González.

Sin embargo, puntualiza el asesor militar, esta acción vuelve a demostrar el nivel de compromiso de los países europeos, porque se había dejado solo a Polonia como el más comprometido en ayudar a Ucrania. El propio gobierno polaco se ha convertido en una fuerza moral de Kiev porque sus acciones, además, presionan a que otros lo imiten en la ayuda. “Sigue existiendo el miedo al empleo de las armas nucleares”.

Para González hay otro factor: “Crece cierta percepción en Europa de que a EU le interesa aumentar el apoyo por varios motivos, no solo por aniquilar la potencia rusa, sino además por crear una red clientelar en Europa a favor de Washington. Y eso está pasando con los carros de combate; parece que EU quiere exponer la tecnología europea y que se implique más en algo que nosotros mismos no tenemos claro de hasta qué punto nos puede generar más problemas”.

Quizás Ucrania logre reunir en los próximos días un centenar de Leopard de distinta generación, pero lo más rápidamente posible habrá que entrenar a sus tropas para que puedan utilizarlos.

El mayor temor en los estrategas militares europeos es que toda esa transferencia de tecnología militar que se envía a Ucrania con el fin de apoyar su resistencia ante los rusos, termine en manos del enemigo, lo que significaría quedar al descubierto. Y probablemente obedezca a una velada intención de renovar todo ese parqué militar, con la finalidad de construir otro nuevo, mejorado y más avanzado.

A este ritmo, todo apunta a que la invasión de Ucrania será la más costosa de la historia tras el final de la Segunda Guerra Mundial; mucho más que la de Vietnam o que la invasión de Afganistán por parte de EU y sus aliados.

Cambia la percepción

¿Cuánto más lo soportará la opinión pública norteamericana en un año inminentemente preelectoral? Recientemente la consultora Pew Research Center elaboró un análisis en el que señala que aumentó la proporción de estadunidenses que cuestionan el apoyo enviado por Biden “porque está creciendo demasiado”.

Alrededor de una cuarta parte, “26%, dice que EU brinda demasiado apoyo a Ucrania, mientras que 31% de los encuestados afirma que otorga la cantidad correcta y a 20% le gustaría dar asistencia adicional a Ucrania”, según la consultora norteamericana.

El estudio muestra cómo ha incrementado la proporción de republicanos que afirman que su país ayuda demasiado a Ucrania. Dicha percepción ha subido seis puntos porcentuales desde el último sondeo de septiembre pasado y 19 puntos desde marzo de 2022.

“Hoy 40% de los republicanos y los independientes de tendencia republicana tienen esta opinión, frente a 32% en el otoño y mucho más que 9% en marzo pasado”, según Pew Research Center.

No solo está la posición de los votantes o potenciales votantes republicanos: también figura un cierto cambio de tendencia en la posición demócrata y es algo que Biden no debería ignorar de cara a buscar la reelección.

De acuerdo con el sondeo: “Hay un aumento en la proporción de demócratas que creen que EU brinda demasiado apoyo a Ucrania. Aun así, solo 15% de los demócratas e independientes de tendencia demócrata dicen esto actualmente, frente a 5% en marzo pasado.
Alrededor de seis de cada diez demócratas consideran que EU brinda la cantidad adecuada de apoyo a Ucrania (40%) o bien 23% considera que debería apoyarse más”.