Kiev, Ucrania, 22 de agosto. Ucrania ratificó el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional (CPI), un paso más hacia la membresía y un gesto que abría la posibilidad de que se procese a más funcionarios rusos por crímenes de guerra.
El parlamento ucraniano, el Verkhovna Rada, votó a favor de ratificar el estatuto de la CPI.
La membresía de la CPI es un requisito para entrar en la Unión Europea (UE), algo a lo que aspira Ucrania. El país fue aceptado oficialmente como candidato en junio de 2022, cuatro meses después de que Rusia comenzara su invasión de plena escala.
El documento fue firmado en un principio por el gobierno ucraniano en 2000, pero la Corte Constitucional bloqueó la ratificación en 2001 y declaró inconstitucional que se autorizara a la CPI a fallar sobre las acciones de Ucrania.
La cuestión de la membresía en la CPI se retomó en 2014 después de que Rusia se anexionara ilegalmente la península ucraniana de Crimea y ocupara partes de las regiones de Donetsk y Luhansk.
Sin embargo, muchos ucranianos temían que la ratificación del Estatuto de Roma permitiera a la CPI procesar a ciudadanos ucranianos que participan en el conflicto armado en territorio ucraniano.
En un reflejo de esas preocupaciones, la legislación contiene una cláusula sobre que Ucrania no reconocerá la jurisdicción de la CPI en casos donde los crímenes puedan haber sido cometidos por ciudadanos ucranianos.
La Corte Penal Internacional emitió órdenes de arresto en 2023 contra el presidente de Rusia, Vladímir Putin, y Maria Lvova-Belova, presidenta de la Comisión para Derechos de los Niños, por acusaciones de crímenes de guerra relacionadas con la deportación forzosa de niños ucranianos. Al año siguiente se emitieron nuevas órdenes contra el ministro ruso de Defensa, Sergei Shoigu, y el jefe del Estado Mayor del ejército ruso, el general Valery Gerasimov.