Kiev, Ucrania, 13 de diciembre. El Ministerio de Defensa de Ucrania presentó el año pasado una nueva agencia estatal para sus fuerzas armadas. Fue la respuesta del gobierno a la corrupción desenfrenada dentro de las empresas de adquisiciones del ministerio, y se pretendía que fuera un motor de reforma en el esquivo camino hacia la membresía en la OTAN.
La empresa, encargada de comprar bienes militares no letales como alimentos, ropa y combustible, ya ha contratado el 95% de los productos solicitados para el suministro, y ha ahorrado un 25% en el proceso, indicó Arsen Zhumadilov, el CEO del Operador Logístico Estatal, conocido por la abreviatura local DOT. Pronto, dijo, DOT también comenzará a adquirir drones.
Este tipo de resultados son un ejemplo del tipo de reforma que Ucrania espera que ayude a despejar el camino hacia la OTAN, un elemento disuasorio clave contra Rusia, han argumentado los funcionarios. La membresía en la alianza sigue siendo en gran medida una cuestión política, con estados clave reacios a otorgarla por temor a una escalada por parte de Moscú.
Los funcionarios occidentales también están esperando con interés la inauguración del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, antes de hacer declaraciones. Pero los funcionarios de la OTAN también han exigido reformas generalizadas contra la corrupción antes de que Kiev pueda unirse.