Taipéi, Taiwán, 16 de octubre. El presidente chino Xi Jinping realizó una inusual visita a una provincia frente a Taiwán, tras unas maniobras militares que movilizaron a la marina, fuerza aérea, unidad de misiles e infantería en un simulacro de bloqueo a la isla democrática que Beijing reclama como propia y amenaza con anexarse a la fuerza.
Xi no formuló comentarios sobre las maniobras militares en su visita a la provincia de Fujian, según la agencia de noticias oficial Xinhua, pero la visita tuvo lugar luego que China despachó una cifra sin precedente de 125 aeronaves, así como el portaaviones Liaoning y buques, en enormes maniobras militares alrededor de Taiwán y sus islas cercanas el lunes.
Xi por lo general se ha abstenido de hacer apariciones públicas y viajes al exterior en el último año, pero traer a Taiwán bajo control de Beijing sigue siendo una prioridad para su administración como jefe del Partido Comunista y su fuerza armada, el Ejército Popular de Liberación.
El recién elegido presidente de Taiwán Lai Ching-te ha sido duramente criticado por Beijing por rechazar su posición de que Taiwán es parte de China.
Las maniobras ocurrieron cuatro días después de que Taiwán celebró el aniversario de la fundación de su gobierno, cuando el presidente dijo en un discurso que China no tiene derecho a representar a Taiwán y prometió “resistir cualquier intento de anexión o acoso”.
Taiwán fue colonia japonesa antes de ser unida a China a fines de la Segunda Guerra Mundial. Se escindió en 1949 cuando los nacionalistas de Chiang Kai-shek huyeron a la isla, luego que los comunistas de Mao Tse-Tung los derrotaron y tomaron el poder.