Naciones Unidas, Nueva York, 20 de septiembre. El jefe de la Organización de Naciones Unidas (ONU) advirtió que las “puertas del infierno” están al alcance de la mano a medida que se intensifica el cambio climático, y altos funcionarios internacionales dijeron que los líderes del mundo todavía no están haciendo lo suficiente para frenar la contaminación de los gases que atrapan el calor.
Esas naciones permanecieron en silencio. No se les permitió hablar porque, dijeron los organizadores, no tenían nuevas acciones que tomar.
Los únicos países que promocionaron sus esfuerzos —"los primeros en actuar y los hacedores”, los llamó las Naciones Unidas— fueron responsables de sólo una novena parte de la contaminación anual por carbono en el mundo.
“La humanidad ha abierto las puertas del infierno”, afirmó el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, al inaugurar una cumbre especial sobre ambición climática. “El calor horrendo está teniendo efectos horrendos. Agricultores angustiados observan los cultivos arrastrados por las inundaciones. Temperaturas sofocantes que generan enfermedades. Y miles de personas huyen aterrorizadas mientras se desatan incendios históricos”.
Guterres convocó la cumbre con la idea de que sólo los líderes mundiales que llegaran con nuevas acciones concretas podrían abordar el tema con sus pares. Pero los líderes de los países que producen la mayor cantidad de gases que atrapan el calor optaron por ni siquiera preguntar.
Los jefes de Estado de China, Estados Unidos, India, Rusia, Reino Unido y Francia no asistieron a la cumbre. Estados Unidos, que ha emitido la mayor cantidad de dióxido de carbono a la atmósfera durante décadas, envió a su enviado climático, John Kerry, a pesar de que el presidente Joe Biden estaba en la ciudad. Pero la ONU no le dio a Kerry un lugar para hablar, aunque estuvo en la cumbre. Pero el gobernador de California, Gavin Newsome, tuvo un espacio para hablar y promocionar los esfuerzos de su estado.
Los 32 líderes nacionales que calificaron representan sólo el 11% de la contaminación mundial por dióxido de carbono. China y Estados Unidos emiten más dióxido de carbono que esos 32 países juntos. También se permitió hablar a la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen.
Aunque en 2015 el mundo adoptó el objetivo de limitar el calentamiento a 1.5 grados Celsius (2.7 Fahrenheit) desde la época preindustrial, la Tierra está en camino de calentarse 2.8 °C (5 °F).
Guterres llamó a “los principales emisores —que se han beneficiado más de los combustibles fósiles— a hacer esfuerzos adicionales para reducir las emisiones, y a los países ricos a apoyar a las economías emergentes para que lo hagan”. Ellos guardaron silencio.