Roma, Italia, 19 de febrero. La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, visitó al papa Francisco en el hospital y reportó que estaba “alerta y receptivo” y de buen humor, a pesar de su diagnóstico de neumonía y una complicada infección bronquial que ha mantenido al pontífice de 88 años alejado de sus funciones durante seis días.
Meloni indicó que quería llevarle los deseos de pronta recuperación al papa en nombre del gobierno y de toda la nación. “Bromeamos como siempre. No ha perdido su proverbial sentido del humor”, afirmó en un comunicado emitido por su oficina.
La visita de Meloni marcó la primera confirmación de un visitante externo que ha acudido a ver al papa, más allá de sus secretarios y equipo médico, desde su ingreso el viernes en el hospital Gemelli de Roma, donde los papas tienen su propia suite en el décimo piso.
El Vaticano ha indicado que Francisco, quien se sometió a la extirpación de parte de un pulmón cuando era joven, estaba de pie, comiendo y se había levantado de la cama tras una noche tranquila, un día después de que las pruebas confirmaran que tenía neumonía en ambos pulmones además de bronquitis asmática. La visita de Meloni parecía tener como objetivo enviar un mensaje tranquilizador, especialmente a los italianos que no han visto ni siquiera una fotografía de Francisco desde el viernes.
La primera ministra italiana, que llegó al poder en 2022 con un mensaje que destacaba sus credenciales cristianas, se ha referido en términos elogiosos al papa Benedicto XVI, quien fue un punto de referencia para conservadores europeos como ella. También ha colaborado de manera constructiva con Francisco en una campaña para revertir la baja tasa de natalidad en Italia, aunque no necesariamente coinciden en la represión de su gobierno contra los migrantes.
Su visita se produjo mientras las oraciones por la recuperación de Francisco llegaban en abundancia. Este día, el vicario de Francisco para Roma instó a todos los fieles a dedicar una hora de oración silenciosa por el papa antes de los servicios de vísperas de la tarde; algunos visitantes del Gemelli encendieron una vela en su honor y los peregrinos que habían planeado asistir a su audiencia general semanal acudieron a la Plaza de San Pedro de todos modos para ofrecer una oración después de que esta fue cancelada.