Tel Aviv, Israel, a 15 de abril. Las manifestaciones en Israel contra el plan gubernamental de reformar el poder judicial continuaron el sábado, a pesar de la decisión del primer ministro Benjamin Netanyahu de suspender sus polémicas propuestas.
Decenas de miles de personas participaron en la protesta principal, en la ciudad de Tel Aviv, mientras hubo otras manifestaciones más pequeñas en el resto del país.
Los organizadores de las manifestaciones, que han realizado estas protestas semanales durante más de tres meses, buscan mantener la presión sobre Netanyahu y su gobierno hasta que se eliminen por completo los cambios propuestos.
Cediendo a las protestas masivas, Netanyahu detuvo en marzo sus planes de reforma, alegando que quería “evitar una guerra civil”.
El plan de Netanyahu, quien está siendo juzgado por cargos de corrupción, buscaba darle a él y a sus aliados en el gobierno —de la línea más dura que haya habido en Israel—, la última palabra en el nombramiento de los jueces de la nación.
También busca darle al Parlamento, que está controlado por sus aliados, la autoridad para anular las decisiones de la Corte Suprema y limitar la capacidad de la corte para revisar las leyes.
Los detractores afirman que la reforma destruiría un sistema de controles y equilibrios al concentrar el poder en manos de Netanyahu y sus aliados en el Parlamento. También alegan que Netanyahu tiene un conflicto de intereses, en momentos en que está siendo juzgado.