Naciones Unidas, Nueva York, 17 de octubre. Más de mil millones de personas en el mundo viven en pobreza extrema, más de la mitad de ellas son niños y casi el 40% vive en países vulnerables y asolados por conflictos, de acuerdo con un informe publicado este día.
El informe, elaborado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y la Iniciativa de la Universidad de Oxford sobre Pobreza y Desarrollo Humano, señala también que más del 83% de los pobres viven en zonas rurales, y el mismo porcentaje vive en África subsahariana y Asia meridional.
El PNUD y la Universidad de Oxford publican desde 2010 el Índice de Pobreza Multidimensional (IPM), el cual se basa en 10 indicadores, entre ellos la salud, la educación y el nivel de vida. El índice de este año incluye datos de 112 países con una población combinada de seis mil 300 millones de personas.
Según el índice, mil 100 millones de personas viven en pobreza extrema, y casi la mitad de ellas se encuentran en cinco países: en India viven 234 millones de personas en pobreza extrema; en Pakistán, 93 millones; en Etiopía, 86 millones; en Nigeria, 74 millones, y en Congo, 66 millones.
Más de la mitad de las personas que viven en condiciones de pobreza —584 millones— son menores de 18 años, y de este total, 317 millones se encuentran en África subsahariana y 184 millones en Asia meridional, según el informe. En Afganistán, donde la pobreza ha aumentado, el porcentaje de niños que vive en condiciones de pobreza es aún mayor: casi el 59%.
El PNUD y la Universidad de Oxford señalaron que el informe de este año se enfocaba en tiempos de conflicto porque en 2023 se produjeron más conflictos que en ningún otro periodo desde la Segunda Guerra Mundial, y que se alcanzó la cifra sin precedentes de 117 millones de personas obligadas a huir de sus hogares debido a conflictos, desastres y otros factores.
Pedro Conceição, director de la oficina del PNUD que elabora anualmente el Informe sobre Desarrollo Humano, dijo que “al cotejar por primera vez los datos sobre conflictos con los datos globales del IPM, el informe revela la cruda realidad de quienes sufren simultáneamente el impacto del conflicto y la pobreza”.
“La asombrosa cifra de 455 millones de personas, que son multidimensionalmente pobres y además viven en contextos de conflicto, enfrentan privaciones significativamente más duras —de tres a cinco veces más graves— en lo que respecta a necesidades básicas como la nutrición, el agua y el saneamiento, la electricidad y la educación, en comparación con las personas en situación de pobreza que viven en entornos más pacíficos”, dijo en una declaración a la prensa.