Beirut, Líbano, 26 de noviembre. Aviones israelíes atacaron un edificio residencial en el centro de Beirut, mientras que se emitieron nuevas órdenes de evacuación para 20 edificios en los suburbios del sur de la capital libanesa, previo a la votación sobre un acuerdo de alto el fuego.
El ataque destruyó el edificio en el barrio de Basta, en el centro de Beirut, en el segundo ataque realizado en los últimos días en esa concurrida zona, cerca del centro de la ciudad.
Hasta el momento, no se han reportado víctimas. Tampoco se sabe si el objetivo era alguien en particular, aunque Israel afirma que sus ataques aéreos van dirigidos a funcionarios y activos de Hezbollah.
En una señal de más ataques por venir, el portavoz militar israelí, Avichay Adraee, emitió advertencias de evacuación para 20 edificios en los suburbios del sur de Beirut, así como una advertencia para la ciudad sureña de Naqoura, donde se encuentra la sede de la misión de paz de Naciones Unidas, conocida como UNIFIL.
El ataque en Beirut se produjo horas antes de que el gabinete de seguridad de Israel se reuniera para votar sobre un acuerdo de alto el fuego mediado por Estados Unidos y destinado a poner fin a más de un año de combates entre Israel y el grupo político-paramilitar libanés Hezbollah.
Crecen las esperanzas por el acuerdo, en el que se pide una pausa inicial de dos meses en los combates y se exigiría que Hezbollah termine su presencia armada en una amplia franja del sur del Líbano, mientras que las tropas israelíes regresarían a su lado de la frontera.
Se esperaba que el gabinete de seguridad de Israel, que se reunió por la tarde, aprobara la propuesta, apoyada también por Hezbollah, según autoridades libanesas.
Uno de los principales puntos de discordia es la exigencia israelí de reservarse el derecho de actuar en caso de que Hezbollah viole sus obligaciones. Según la propuesta, miles de tropas libanesas y cascos azules de la ONU se desplegarían en el sur, y un panel internacional encabezado por Estados Unidos supervisaría el cumplimiento de todas las partes.
El ministro de Defensa de Israel, Israel Katz, afirmó que el ejército atacaría a Hezbollah si la fuerza de paz de la ONU no proporciona una “aplicación efectiva” del acuerdo.
“Si ustedes no actúan, actuaremos nosotros, y con gran fuerza”, manifestó a la enviada especial de la ONU, Jeanine Hennis-Plasschaert.
El principal diplomático de la Unión Europea, Josep Borrell, declaró que las preocupaciones de seguridad de Israel se han abordado en el acuerdo, mediado por Estados Unidos y Francia.
“No hay excusa para no implementar un alto el fuego. De lo contrario, Líbano se desmoronará", dijo Borrell a los periodistas en Fiuggi, Italia, al margen de una reunión del Grupo de los Siete. Apuntó que Estados Unidos presidiría un comité de implementación del alto el fuego, y Francia participaría a petición de Líbano.