Berlín, Alemania, 24 de febrero. Los conservadores tradicionales liderados por Friedrich Merz ganaron las elecciones nacionales en Alemania, lo que aseguró que Ucrania tendrá un apoyo aún más fuerte en el país más grande de la Unión Europea y dio esperanzas de renovación en una potencia económica que ha sufrido en los últimos años.
El partido antiinmigrantes y de extrema derecha Alternativa por Alemania (AfD) registró un rápido ascenso para convertirse en la segunda fuerza política más grande del país, beneficiándose de una reacción en contra del alto número de migrantes y refugiados que la nación ha absorbido en la última década y de una serie de ataques extremistas que han sacudido su sensación de seguridad.
Se espera que Merz, quien promete unificar a Europa frente a los desafíos de Rusia y Estados Unidos, se convierta en el próximo líder del país.
Sus primeros comentarios este lunes después de que su partido fuera el más votado en las elecciones nacionales fueron palabras de apoyo para Ucrania, que conmemoraba el tercer aniversario de la invasión a gran escala de Rusia.
“Europa se mantiene inquebrantablemente al lado de Ucrania”, publicó Merz en X. “Ahora más que nunca, es cierto: debemos poner a Ucrania en una posición de fuerza”.
“Para una paz justa, el país atacado debe ser parte de las negociaciones de paz”, agregó Merz, en un aparente reproche al gobierno de Trump, que ha comenzado conversaciones con Rusia sobre el fin de la guerra que hasta ahora han excluido a Ucrania y Europa.
Merz probablemente se asociará con los socialdemócratas de centroizquierda, que sufrieron una dura derrota tras el colapso de su coalición. Pero los resultados se interpretaron como un rechazo a los partidos tradicionales, ya que AfD logró sus mejores resultados históricos, los más fuertes para un partido de ultraderecha desde la II Guerra Mundial.
La campaña se vio dominada por preocupaciones sobre la inmigración de gran escala —Merz también prometió mano dura—, así como por los años de estancamiento de la economía más grande de Europa.
Los mercados celebraron la victoria del partido, de tendencia fiscal conservadora, con una subida el lunes por la mañana de las acciones de importantes empresas alemanas ante las esperanzas de un gobierno de coalición estable que pueda poner fin al estancamiento político y abordar los problemas económicos del país.
Las elecciones también se celebraron en un contexto de creciente incertidumbre sobre el futuro de Ucrania y la alianza de Europa con Estados Unidos.
Los resultados publicados por la autoridad electoral mostraron que los democristianos de Merz y los socialdemócratas de centroizquierda obtuvieron una mayoría combinada de escaños en la legislatura nacional después de que varios partidos pequeños no lograran alcanzar el umbral de representación parlamentaria. Scholz también ha apoyado a Ucrania con armas y otras formas de ayuda, pero algunos socios occidentales han dicho que podría haber hecho más, y más rápido.
Merz indicó la noche de las elecciones que espera formar un gobierno para Pascua a más tardar. Ha descartado una coalición con el ultraderechista AfD. Por el momento, el canciller saliente, Olaf Scholz, cuyo Partido Socialdemócrata (SPD) sufrió un duro golpe, permanecerá en el cargo como cabeza de un gobierno interino.
Los partidos tradicionales mantienen la mayoría ante el auge de la ultraderecha
Los conservadores de Merz obtuvieron 208 escaños en el Bundestag de 630 puestos, mientras que AfD consiguió 152. Los tres partidos de la coalición gobernante anterior perdieron escaños el SPD cayó a 120 escaños y los Verdes a 85. Los liberaldemócratas, un grupo proempresa que provocó las elecciones anticipadas al retirarse de la coalición, no lograron el 5% de votos necesario para obtener escaños.
El partido Izquierda consiguió 64 escaños, mientras que la Alianza de Sahra Wagenknecht, un grupo de izquierda, quedó apenas por debajo del umbral del 5% para entrar en el parlamento.
Conservador Friedrich Merz aventaja en elecciones en Alemania