Islamabad, Pakistán, 4 de octubre. Las autoridades de Pakistán instalaron contenedores de mercancías en las principales carreteras y autopistas de acceso a la capital y suspendieron el servicio de telefonía móvil en Islamabad en un intento por evitar que los partidarios del encarcelado ex primer ministro Imran Khan celebren un acto para pedir su liberación.
El gobierno del primer ministro Shehbaz Sharif movilizó fuerzas paramilitares y policías adicionales y cerró escuelas tanto en Islamabad como en Rawalpindi, una ciudad cercana, luego de que el partido de Khan, Pakistan Tehreek-e-Insaf, se negó a retirar la convocatoria de la protesta.
Videos publicados en las redes sociales mostraban a agentes colocando los contenedores en puentes y sobre el asalto de una importante autovía en la provincia noroccidental de Khyber Pakhtunkhwa, donde gobierna la formación de Khan. Los seguidores del exmandatario tienen previsto marchar desde allí hasta Islamabad desafiando la prohibición a los mítines impuesta esta semana.
La policía habría arrestado a algunos de los seguidores del partido.
Khan, que es el principal rival político de Sharif, lleva más de un año encarcelado en relación con más de 150 casos policiales. A pesar de sus problemas con la justicia, que según los críticos y su partido tienen motivaciones políticas, sigue siendo una figura popular. Fue destituido en 2022 luego de una moción de censura en el Parlamento y fue detenido un año después, cuando un tribunal lo sentenció a tres años de cárcel en un caso de soborno.
La suspensión del servicio de telefonía móvil en Islamabad y Rawalpindi cortó las comunicaciones y afectó a servicios básicos como la banca electrónica y los servicios de transporte y reparto de comida. Muchos tuvieron dificultades para desplazarse debido a las barricadas instaladas en las carreteras.