Dirigiéndose a la multitud de fieles y peregrinos reunidos en la Plaza de San Pedro y comentando el Evangelio del día , el Papa Francisco retomó un pensamiento expresado en su reciente encíclica Dilexit Nos : el corazón es “la fuente y la raíz de todas sus demás potencias, convicciones, pasiones, elecciones”. Y Jesús, observó el Sucesor de Pedro, nos dice que la fuente de todo es el amor, que no debemos nunca separar a Dios del hombre.
El Pontífice afirmó que no cuentan las prácticas exteriores, sino cómo nos amamos entre nosotros. Además, reconoció que podemos hacer muchas cosas, pero hacerlas solo para nosotros mismos y sin amor, con el corazón distraído o cerrado. “Y esto no va”, agregó el Pontífice de manera espontánea, acotando que hay que realizarlas “con amor”.
(Con información de Vaticano News)