Detienen a líder independentista de Nueva Caledonia, Francia

Por presuntos actos de violencia en protestas independentistas

Redacción
Internacional
Policías en la comisaría central de Nouméa, Nueva Caledonia.
Foto: AP

París, Francia, 19 de junio. Once personas fueron detenidas en el inestable territorio pacífico francés de Nueva Caledonia, incluido un líder independentista, sospechosos de estar implicados en la violencia letal que remeció el archipiélago donde la población indígena kanak busca desde hace tiempo independizarse de Francia.

Las detenciones de la mañana formaban parte de una investigación policial iniciada el 17 de mayo, días después de que comenzaran las protestas, sobre una serie de enfrentamientos armados, saqueos, incendios y otros incidentes violentos que convirtieron partes de la capital Nouméa, y sus suburbios en zonas vedadas.

La operación policial comenzó de madrugada y continuó con más detenciones a lo largo del día, incluidas algunas de personas que se presentaron de forma voluntaria en comisaría, indicó el fiscal de Nueva Caledonia, Yves Dupas.

Entre los detenidos estaba Christian Tein, líder de un grupo independentista que según las autoridades francesas jugó un papel destacado en las semanas de violencia desencadenadas en mayo por una controversial reforma electoral para el territorio. Dupas no identificó a los otros diez sospechosos.

La revuelta obligó a Francia a declarar el estado de emergencia en el archipiélago y llevar con premura refuerzos policiales para unas fuerzas de seguridad que se vieron rápidamente sobrepasadas. La violencia provocó nueve muertos, incluidos dos gendarmes, y destrucción generalizada de comercios, negocios y viviendas.

Las detenciones formaban parte de una pesquisa policial sobre una larga lista de delitos, como complicidad en homicidio e intento de homicidio, robo a mano armada, incendio provocado y pertenencia a un grupo creado para preparar actos violentos, según el fiscal. Los posibles cargos permiten a los investigadores retener a los detenidos para interrogarlos hasta 96 horas, añadió. Después de eso, un juez instructor tendría que decidir si la policía ha reunido pruebas suficiente para justificar cargos formales.