La Haya, Holanda, 14 de marzo. El expresidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, compareció desde prisión por videoconferencia ante los jueces de la Corte Penal Internacional (CPI), días después de su arresto en Manila por cargos de asesinato relacionados con la mortal “guerra contra las drogas” que supervisó durante su mandato.
Duterte, de 79 años, no se presentó en la corte de La Haya, pero apareció en una pantalla de video desde el centro de detención donde se encuentra, a aproximadamente 1.5 kilómetros (una milla) de distancia.
Para las familias de las víctimas de la ofensiva contra las drogas, la aparición de Duterte en la corte fue una muy esperada señal de esperanza. Los fervientes seguidores de Duterte consideran que su arresto es ilegal.
Su abogado, Salvador Medialdea, utilizó la audiencia para criticar su arresto en Manila, calificándolo como un “secuestro puro y simple”. Dijo que a Duterte “se le negó todo acceso a los recursos legales en el país del que es ciudadano, y todo esto en el marco de una venganza política”.
La jueza presidenta Iulia Antoanella Motoc fijó el 23 de septiembre como fecha para la audiencia previa al juicio con el fin de establecer si las pruebas de la fiscalía son lo suficientemente sólidas como para justificar que el caso vaya a juicio. Si se realiza, el juicio podría tardar años, y si Duterte es condenado, enfrenta una pena máxima de cadena perpetua.
Los cálculos del número de muertos durante el mandato presidencial de Duterte varían desde los más de seis mil que reporta la policía nacional, hasta 30 mil, según cifras de grupos defensores de derechos humanos.
La jueza de la CPI señaló que se permitió que Duterte participara en su primera audiencia por videoconferencia porque acababa de llegar de un largo vuelo.
Duterte, vestido con chaqueta y corbata, escuchó la audiencia a través de auriculares, a menudo con los ojos cerrados. Habló en inglés para confirmar su nombre, así como su fecha y lugar de nacimiento. No se le exigió que presentara una declaración de culpabilidad o inocencia. La audiencia, que comenzó con aproximadamente media hora de retraso, duró alrededor de 30 minutos.
Medialdea dijo que Duterte había estado bajo observación en un hospital debido a problemas de salud.
La jueza, dirigiéndose a Duterte, dijo: “El médico de la corte opinó que usted estaba plenamente consciente mentalmente y en condiciones adecuadas”.
La hija de Duterte saluda a los seguidores fuera de la corte
Duterte fue arrestado el martes entre escenas caóticas en la capital filipina tras regresar de una visita a Hong Kong. Fue trasladado a Holanda rápidamente en un jet chárter.