Jerusalén, Israel, 30 de septiembre. El primer ataque aéreo israelí en el centro de Beirut en casi un año de conflicto destruyó un edificio residencial el lunes en la madrugada, horas después de que Israel impactó objetivos en todo Líbano y mató a decenas de personas mientras Hezbollah sufría bajas importantes en su estructura de mando, incluido el deceso de su líder Hassan Nasrallah.
El bombardeo alcanzó un edificio residencial de varios niveles, según un periodista de la agencia The Associated Press presente en el lugar. En videos podían verse ambulancias y una multitud reunida bajo el edificio ubicado en un distrito predominantemente suní en una zona repleta de comercios.
El ataque aéreo cobró la vida de una persona y dejó heridas a otras 16, informó un funcionario de Protección Civil de Líbano, quien habló a condición de guardar el anonimato al no estar autorizado a dar declaraciones a la prensa. Añadió que la persona fallecida era integrante de al-Jamaa al-Islamiya, o Grupo Islámico, una organización política y militar afiliada a Hezbollah.
Una facción palestina de izquierda en Líbano dijo que tres de sus integrantes murieron en el bombardeo. El Frente Popular para la Liberación de Palestina señaló en un comunicado el lunes que sus comandantes militares de seguridad en Líbano, y un tercer elemento, fallecieron durante el ataque.
No se tiene conocimiento de que el grupo haya tenido un papel relevante en el conflicto actual entre Israel y Hezbollah.
Durante esta madrugada, otro ataque mató a un comandante de Hamás, que tiene presencia en los campos de refugiados palestinos de Líbano. Hamás dijo que Fatah Sharif y su familia habían muerto en un ataque al campo de refugiados de Al-Buss en la ciudad portuaria de Tyre, en el sur de Líbano.
En la última semana, Israel ha lanzado varios ataques —incluido el del viernes que mató a Nasrallah–- contra los suburbios del sur de Beirut, donde Hezbollah tiene fuerte presencia, pero no había atacado lugares cercanos al centro de la ciudad.