Accidente aéreo en Brasil deja 62 muertos

Las autoridades ya investigan la causa del incidente

Redacción
Internacional
Accidente aéreo en Brasil
Foto: AP

Vinhedo, Brasil, 10 de agosto. Las autoridades brasileñas trabajaban el sábado para esclarecer la causa exacta de un accidente aéreo ocurrido en la víspera en el estado de Sao Paulo, en el que fallecieron las 62 personas que iban a bordo del avión.

El aparato, un bimotor de turbohélices ATR 72-500 de la aerolínea local Voepass, se dirigía al aeropuerto internacional de Guarulhos, en Sao Paulo , con 58 pasajeros y cuatro tripulantes a bordo cuando se estrelló en la ciudad de Vinhedo.

En un principio, la aerolínea señaló que su avión llevaba 62 personas a bordo, luego informó que eran 61 y el sábado temprano volvió a subir el número a 62 luego de que encontró que un pasajero llamado Constantino Thé Maia no figuraba en la lista original.

Las imágenes grabadas por testigos mostraban como el avión caía en barrena hasta estrellarse contra el piso en el interior de una comunidad residencial cerrada. El fuselaje quedó consumido por el incendio posterior. Los residentes indicaron que sobre el terreno no hubo heridos.

La lluvia caía sobre los rescatistas mientras recuperaban los primeros cadáveres en pleno invierno en el hemisferio sur. Algunos residentes abandonaron la comunidad en silencio para pasar la noche en otro lugar.

Fue el accidente aéreo más letal desde enero de 2023, cuando 72 personas murieron a bordo de un avión de Yeti Airlines en Nepal que se estrelló cuando se disponía a aterrizar. Ese aparato también era un ATR 72, y el informe final atribuyó el siniestro a un error del piloto.

Un reporte del centro meteorológico de la televisora brasileña Globo para el viernes apuntó que “confirmaba la posibilidad de formación de hielo en la región de Vinhedo”, y la prensa local citó a expertos que apuntaban a la formación de hielo como posible causa del accidente.

El secretario de Seguridad Pública de Sao Paulo, Guilherme Derrite, dijo a reporteros el viernes que se había recuperado la caja negra del avión —un dispositivo de color naranja que graba los datos de vuelo y las voces de cabina—, y que aparentemente estaba en buen estado.

Marcelo Moura, director de operaciones de Voepass, dijo a la prensa por la noche que, aunque había previsión de hielo, estaba dentro de los niveles aceptables para el avión.

Asimismo, el teniente coronel Carlos Henrique Baldi, del centro de investigación y prevención de accidentes aéreos de la Fuerza Aérea Brasileña, explicó a reporteros en una rueda de prensa al final de la tarde que era demasiado pronto para confirmar si el hielo había causado el accidente.

El avión está “homologado en varios países para volar en condiciones severas de hielo, incluso en países distintos al nuestro, donde el impacto del hielo es mas significativo”, dijo Baldi, que dirige la división de investigación de la institución.