SANTIAGO, febrero 26.- El gobierno de Chile informó el miércoles que el suministro eléctrico fue restituido en la mayor parte del territorio nacional después de que un masivo apagón dejara al país en completa oscuridad durante varias horas a raíz de una falla en una importante línea de trasmisión.
A su vez anunció una investigación para averiguar las causas del incidente y posibles fallecimientos vinculados con el incidente.
El presidente Gabriel Boric calificó al apagón de “indignante” y aseguró que el Estado investigará tanto las razones de la falla técnica en la línea de transmisión —a cargo del gigante energético colombiano ISA Interchile— como el retraso en la reposición del servicio. “No es tolerable que por responsabilidad de una o varias empresas se afecte la vida cotidiana de millones de chilenos y chilenas”, aseveró el mandatario.
Chile, con una población de unos 19 millones de habitantes, quedó la víspera y hasta la madrugada del miércoles sumido en tinieblas después de que se desconectara una línea de transmisión ubicada en el norte del país, considerada la espina dorsal del sistema eléctrico chileno y responsable de un cuarto de la energía enviada a otras regiones. Ello desencadenó una reacción en cadena y culminó en un apagón total en 14 de las 16 regiones de la nación, golpeando al 98% de la población.
El corte de luz masivo se extendió por cerca de 10 horas y generó caos, por lo que las autoridades decretaron el estado de excepción por catástrofe y un toque de queda.
El apagón derivó en la cancelación de clases, actividades deportivas y culturales y encendió las alertas por los servicios esenciales, sobre todo la salud. Asimismo, provocó un enorme caos circulatorio, especialmente en Santiago y otros centros urbanos e impidió la actividad bancaria, financiera, minera y comercial.