Estados Unidos, 19 de enero. Travis Kelce dio a Taylor Swift muchos motivos para festejar el sábado.
Bajo la mirada de su novia y de la basquetbolista estelar Caitlin Clark desde una suite, el tight end atrapó siete pases para 117 yardas y un touchdown. En el camino impuso varios récords y ayudó a que los Chiefs de Kansas City derrotaran 23-14 a los Texans de Houston.
Kansas City selló así su séptimo pasaje consecutivo para la final de la Conferencia Americana.
“Siento que, si uno llega a un campo de fútbol americano, siempre tiene algo que demostrar”, dijo Kelce, quien tuvo una campaña regular gris para sus estándares pero siempre parece elevar su nivel de juego en los playoffs.
“Desearía tener un interruptor para encenderme. Pero pienso que todos aquí, durante toda la semana o en dos o tres, han buscado tenernos descansados y listos para los playoffs para un avance así. Y hoy llegamos peleando con todo. Nos hemos sentido muy bien”.
Ciertamente, su desempeño emocionó a Swift y a Clark durante el partido.
La superestrella del pop llegó mucho más temprano de lo habitual, aproximadamente dos horas antes del inicio del encuentro, y estaba vestida de Chanel casi de pies a cabeza, incluyendo una chaqueta de tweed en blanco y negro, un conjunto de una sola pieza con cierre de cremallera hasta el cuello, un cinturón de perlas y pendientes.
Pasó parte del encuentro sentada en un palco junto a Clark, quien también es una gran aficionada de los Chiefs.
Swift comenzó su romance con Kelce la temporada pasada, cuando el jugador invitó a la cantante de “Anti-Hero” a verlo jugar en un partido contra los Bears en septiembre. Desde entonces, los dos han pasado mucho tiempo juntos, a menudo seguidos por las cámaras.
La cantante ha estado pasando más tiempo en Kansas City después de concluir su gira Eras Tour, el 8 de diciembre en Canadá.
Los Chiefs tuvieron una semana de descanso en la primera ronda de los playoffs después de terminar la temporada regular con un récord de 15-2 y obtener el primer puesto de la conferencia Buscarán ser el primer equipo en la historia de la NFL en ganar tres Super Bowls consecutivos.
Swift estuvo presente en el más reciente en Las Vegas, regresando rápidamente de su concierto en Tokio el mismo fin de semana para llegar a tiempo.