Gioconda Belli. Un silencio lleno de murmullos. Seix Barral. 342 pp.
El 16 de enero pasado Gioconda Belli (Managua, Nicaragua 1948) recibió la nacionalidad española. Esto consumó el segundo exilio de la exguerrillera, reconocida escritora y ahora perseguida por el gobierno de Daniel Ortega.
Pocas personas con su autoridad para hablar de aquello en que se convirtió la revolución nicaragüense y de cómo el poder transforma a un líder político.
A finales de la década de los sesenta y principios de los ochenta del siglo pasado Belli dejó todo por la causa; todo, incluyendo a su familia.
Su historia se asemeja a la de decenas de guerrilleros latinoamericanos que por querer cambiar a su país sacrificaron sus vidas privadas. La decisión no fue fácil y en muchas ocasiones el saldo ni siquiera fue favorable. Sobre esto va Un silencio lleno de murmullos, la nueva novela de la narradora y poeta nicaragüense.
“Los hijos de quienes nos involucramos en la revolución sufrían una suerte de abandono. El de los padres se aceptaba. Otra cosa pasaba con las madres. Esa ausencia materna cargaba a ambas partes con un nivel de reproche y culpabilidad muy doloroso. He pensado en mis hijas escribiendo esta novela”, declaró respecto del libro.
Sin ser explícitamente autobiográfica, la historia hace referencias a los conflictos que vive una mujer en la guerrilla. A Valeria, una mujer que renunció a todo para sumarse a las fuerzas armadas de su país, le llega la hora de mirar de frente a su hija Penélope, quien ya adulta quiere conocer completa la historia de su madre.
Cambio de narrativa
El diálogo no es sencillo, pero tampoco incriminatorio. La novela busca conciliación. Hay culpa, pero sobre todo perdón y comprensión. A través de una compleja relación madre-hija la escritora nicaragüense no busca un ajuste de cuentas sino contar desde una perspectiva pocas veces leída y sobre la que todavía faltan testimonios: la visión femenina de la revolución latinoamericana.
Gioconda Belli habla del estigma sobre la madre que deja a sus hijos con su familia por tomar las armas; habla del abuso por parte de sus compañeros; habla de la soledad; pero sobre todo habla de los cuidados. Es verdad que vamos tarde, pero hay que celebrar que novelas como Un silencio lleno de murmullos se atrevan a subvertir el relato latinoamericano desde la entraña.
Otros títulos de Gioconda Belli son El país de las mujeres, La mujer habitada y El infinito en la palma de la mano.
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