LUNA EVA: UN CANTO POÉTICO COLECTIVO AL AMOR Y LA ESPERANZA

“Hemos cruzado fronteras y cada vez con propuestas nuevas”.

Guillermo Medel
Cultura
CIRKO DE MENTE , LUNA DE EVA

Con una gran respuesta del público, en el 50 aniversario del Festival Internacional Cervantino (FIC) el Cirko De Mente estrenó su más reciente espectáculo: Luna Eva, que aborda temas como los ciclos y las transformaciones, por medio de los cuales se busca generar una metáfora en alusión a lo que vivimos los seres humanos durante una larga pandemia en la que el encierro fue también un parteaguas.

En el intermedio se plantean preguntas y reflexiones para que cada uno pueda encontrar un momento de apertura y sensibilidad frente a lo que pueda suceder.

Con espectaculares números de suspensión capilar, equilibrio mano a mano, acrobacia con danza (acrodanza), malabarismo excéntrico, mástil y rueda Cyr, entre otros, Luna Eva integra la instalación hecha por el artista visual Alain Kerriou —quien además se encargó del diseño de vestuario y la iluminación—, a la valiosa aportación llena de atmósferas sonoras del artista vocal y compositor Juan Pablo Villa, quien interpreta la música original en vivo y es además uno de los personajes.

Este espectáculo es también un homenaje a los seres queridos de dos de los artistas en escena, los cuales partieron en los últimos dos años.

Ciclos de vida

Siete pasajeros de una pequeña embarcación se preparan para la pesca del amanecer. Durante la noche reciben señales del satélite que cada noche se transforma, altera las mareas, delimita horizontes y en sus ciclos refleja la luz del sol y de la vida misma: la Luna.

Estas siete historias nacen de una canción de cuna que confronta la vida y la muerte: se trata de una hermosa metáfora que evoca los ciclos lunares y los de la vida.

Andrea Peláez, directora de Luna Eva y cofundadora de Cirko De Mente, es tajante: “En esta embarcación hay que aprender a contener y soltar, a acompañar, a confiar en la luz que refleja la sabia y fiel compañera de viaje, Luna Eva, luz primera, la que toca, la que guía en la más profunda oscuridad”.

Peláez explica que en un proceso de posparto y en el punto más alto de la pandemia se dibujó la idea que, a su vez, parte de una canción de cuna que la abuela paterna de su hija le enseñó. De esta biografía surge una obra entrañable, que sin duda quedará en la memoria del público.

Nueva era del circo

—Las nuevas generaciones ya casi no se identifican con el espectáculo circense. ¿Cómo hacer para llegar a ese público?

—El circo no desapareció. En un circo hay más que animales: está el talento de los acróbatas y, como es el caso de Cirko De Mente, producciones de nivel. El público que pudo ver el espectáculo en el Festival Cervantino quedó encantado con la experiencia. Y eso es reflejo del rumbo que hemos tomado en la compañía.

—¿Qué destaca a esta producción de otras anteriores de Cirko De Mente?

—Somos una compañía mexicana de circo contemporáneo que desde finales de 2003, entre fuegos de feria y lluvias de estrellas, hemos cruzado fronteras. Cada vez con propuestas nuevas, las cuales han sido un éxito. Esta propuesta aborda los ciclos de la vida desde el terreno de los sueños.

Luna Eva, añade Peláez, “tiene un sentido más personal. Y tiene que ver con una síntesis, una suerte de devenir; es decir, siempre buscamos nuevos caminos. Por ello, para este espectáculo el montaje cuenta con música original, la cual interpreta en vivo Juan Pablo Villa, más la instalación del artista interdisciplinario Alain Kerriou: ambos aportan líneas escénicas contemporáneas, mismas que hemos explorado e integrado en este espectáculo”.

—¿De dónde surgen los personajes de esta puesta?

—Aunque la idea parte de experiencias personales, es también una historia que tiene tintes de ficción, ya que la atmósfera no se sitúa en un espacio y tiempo definidos, sino más bien son como mensajes cifrados de la expansión del Universo que nos llegan del pasado. Por ello estos personajes tratan de descifrar el mensaje, que les dirá lo que deben hacer para poder transformarse y de esta manera conocer su devenir por medio de los sueños.

—¿Cómo se define el comienzo y el final de un ciclo de vida en la obra?

—Cuando mi hija nació, a los dos meses murió mi abuela; eso fue como un momento de intersección de puntos cúspide en la existencia desde donde yo lo veía. Por un lado un nacimiento y por otro una muerte, ambos relacionados con la feminidad. Cuando digo que este espectáculo habla acerca de los ciclos es eso: hablar del ciclo de la vida. La Luna es una maestra en ese sentido, porque se llena y se vacía cíclicamente y es lo que nos permite ver que el Universo tiene esa manera de comportarse y que la vida misma es eso, un comienzo y un final.

Este proyecto, concluye, “capta justo esa esencia al ser inspirado por la fuerza de esos entes femeninos que en mi vida personal llegaron y se fueron casi al mismo tiempo y que entonces me hicieron muy presente y consciente de la piel que habitamos y la condición que tenemos”.

Desde hace 20 años Cirko De Mente impulsa, colabora y participa tanto en la organización como en la realización de festivales, encuentros y convenciones de circo en México.

Luna Eva, que se estrenó recientemente en la ciudad de Guanajuato en el 50 aniversario del FIC, hace ahora su primera presentación para el público capitalino del 11 al 27 de noviembre en la Karpa De Mente. Viernes a las 20:00 horas, sábados a las 19:30 y domingos a las 18:00. La entrada no tendrá un costo fijo: será de cooperación voluntaria.

El sábado 3 de diciembre habrá una única función especial en el Teatro de la Ciudad Esperanza Iris.