El ciclo La guitarra hoy del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) se ha consolidado como una plataforma esencial para la música de guitarra en México, brindando un espacio donde convergen intérpretes y compositores de distintas generaciones y estilos.
Se trata de un evento que no solo busca preservar el legado de la guitarra clásica sino también promover nuevas creaciones que exploran los límites del instrumento en el siglo XXI.
Giovanni Piacentini, destacado guitarrista y compositor mexicano, se presentará el 30 de agosto a las 18:00 horas en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes para cerrar con broche de oro este ciclo musical.
Con la frescura y profundidad de su repertorio, amenizará el escenario a partir de piezas que de otra manera resultaría casi imposible conocer.
Para crear un espacio donde las mujeres intérpretes sean escuchadas y reconocidas, el programa que presenta Piacentini incluye tanto obras clásicas de compositoras como Ida Presti e Hildegard von Bingen, como música más contemporánea perteneciente a Violeta Parra y Clarice Assad. De igual manera, interpretará creaciones suyas inspiradas en la poesía de Sor Juana Inés de la Cruz.
Además, contará con la participación especial de la soprano poblana Mariana Garci-Crespo para darle voz a la música de estas grandes mujeres.
El recital también contiene elementos educativos que buscan contextualizar la obra de estas compositoras y su relevancia en la historia de la música.
Piacentini, consciente de la importancia de la educación en la difusión de la música, ha incorporado en su programa una serie de explicaciones y comentarios que permiten al público apreciar en profundidad las piezas interpretadas y el legado de las compositoras. Así, el guitarrista establece un puente entre generaciones de músicos y compositores, asegurando que este instrumento continúe siendo un vehículo de expresión artística vibrante y relevante.
En sus interpretaciones Piacentini no solo rinde homenaje a las tradiciones de la guitarra clásica, sino que también incorpora elementos contemporáneos que desafían las convenciones establecidas. Su enfoque compositivo, influenciado por su formación y sus colaboraciones con otros músicos y artistas, se manifiesta en piezas que fusionan la técnica tradicional con nuevas sonoridades y texturas. Esta capacidad de innovar sin perder el respeto por la tradición es lo que lo distingue.
La guitarra hoy es una plataforma que celebra la guitarra como un instrumento versátil y esencial en la música contemporánea. Se ha convertido en un evento fundamental para la comunidad guitarrística en México y el mundo, además de un referente de la escena musical mexicana, fomentando el diálogo entre tradición e innovación.
Deuda histórica
En entrevista con Vértigo, Piacentini habla sobre la importancia de reconocer la labor de las mujeres en el ámbito musical.
—¿Qué lo motivó a enfocarse en música compuesta por mujeres?
—El año pasado la Orquesta de Cámara de los Ángeles me invitó a participar en un programa que consistía en música de géneros menos representados, incluido obviamente el femenino, y me introdujeron a la música de Violeta Parra. Me pidieron que interpretara un par de piezas suyas y, bueno, de ahí nació la idea de crear un programa más o menos de una hora dedicado precisamente a difundir esta música, que desgraciadamente no se toca tan a menudo y que no tiene la audiencia ni la distribución que se merece.
Agrega: “Le comenté la idea a gente del INBAL y les pareció bien. También fue la suerte de que existe este ciclo de La guitarra hoy y tuve la grandísima fortuna y honor de cerrar el ciclo con este concierto.
—La selección de obras es muy variada tanto en estilos como en contextos históricos. ¿Cómo se decidió por las piezas?
—Cuando me puse a hacer un poco de investigación sobre mujeres compositoras, específicamente de guitarra, desgraciadamente me quedé corto. Esa investigación terminó muy rápido porque simplemente no hay mucho material al respecto. No tuve mucha elección, pero creo que el programa es variado y es importante representar a estos personajes históricos. También creo que de alguna manera las piezas se complementan, aunque sean de diferentes estilos y épocas. Hice lo mejor que pude para hacer un programa que sea contundente, que tenga sentido, que sea relevante y que presente un poco esta historicidad de la voz femenina, en este caso representada a través de la guitarra.
—Las composiciones sobre Sor Juana son de su autoría. ¿Cómo las creó?
—Yo nunca había leído la poesía de Sor Juana. Sabía quién era, obviamente, pero no me había acercado a su literatura. Me conmovió tanto, que terminé dedicándole esta pieza a ella. Fue una especie de comisión que me pidieron hace un par de años, una cantante de Los Ángeles; ella me mandó el texto, leí esos tres poemas y enseguida me puse a escribir música; algo instantáneo. Fue una especie de entusiasmo, nació de haber leído este texto y es una pieza que salió relativamente rápido. Así es que la Rosa divina, el ciclo de canciones dedicado a la poesía de Sor Juana Inés de la Cruz, será el cierre del recital.
—¿Qué espera que el público se lleve con este recital?
—La misión principal es dar a conocer esta música, que al público le guste, conecte con estas piezas y como resultado tenga interés de investigar un poco más sobre estas compositoras. Que nazca un poco de curiosidad, contagiarles para que vayan a buscar música escrita por mujeres. Que también aprendan cómo históricamente las mujeres no han tenido el lugar que se merecen. Desde un punto de vista más personal, se cierra un ciclo muy bonito de mi carrera tocando en esta sala tan prestigiosa, donde crecí viendo muchísimos conciertos y sueño con presentarme en este escenario. Para mí es un sueño hecho realidad y un grandísimo honor. Espero que la gente se conecte más con la guitarra. Y que conozca música de estas compositoras que desgraciadamente de otra forma tal vez no conocería nunca.