El realizador iraní Ali Abbasi regresa luego de su inquietante Border (2018, una película nórdica de terror corporal y romance con procedimiento policial nominada a un Oscar), con Araña sagrada, que ha conseguido llamar la atención de la crítica y del público. La cinta presenta una interesante mezcla de thriller, drama y terror que ofrece una atmósfera única y perturbadora.
La historia sigue a Rahimi (Zar Amir Ebrahimi), una periodista de Teherán, quien se sumerge en los barrios con peor reputación de la ciudad santa de Mashhad para investigar una serie de feminicidios. Pronto se dará cuenta de que las autoridades locales no tienen ninguna prisa por resolver el asunto. Los crímenes son obra de un solo hombre, Saeed Hanaei (Mehdi Bajestani), quien asegura purificar la ciudad de sus pecados y ataca a prostitutas por la noche.
Se inspira la historia en el caso real de Saeed Hanaei, padre de familia y de tres hijos, que asesinó a 16 prostitutas entre 2000 y 2001 en Mashhad, la segunda ciudad más poblada de Irán. Ya hubo un documental sobre él, titulado And Along Came a Spider (2002), que debe su nombre al método que utilizaba Hanaei para atar a sus víctimas antes de depositarlas en las colinas de la ciudad, para después comunicar con orgullo a la prensa el paradero de sus cadáveres y declaraba que una vez más había hecho el trabajo de Alá.
Uno de los aspectos más destacados de la cinta es la actuación del reparto, especialmente la de la actriz principal, Zar Amir Ebrahimi. Su interpretación de la joven protagonista es convincente y nos hace sentirnos muy involucrados con su complejo proceso, lo que ayuda a crear una conexión con el personaje y aumenta el impacto de la historia. Además, la dirección de Abbasi logra mantener la tensión a lo largo de la película, creando una atmósfera misteriosa y escalofriante que envuelve al espectador desde el inicio.
Luz y sombra
La trama de la película se centra en la obsesión de la protagonista por encontrar al asesino en serie que aterroriza a la ciudad. La historia se desarrolla a través de su investigación y sus interacciones con diferentes personajes relacionados con el caso. A medida que avanza la película se desvelan algunos giros inesperados que mantienen al espectador en tensión.
Si bien Araña sagrada tiene una trama intrigante, hay algunos puntos débiles en su guion. La historia se siente un poco desordenada en ciertas partes, lo que puede confundir al espectador y dificultar la comprensión del argumento. Además, algunos personajes secundarios no están bien desarrollados, lo que hace que sus motivaciones y acciones resulten poco claras.
Además de la actuación, entre sus puntos más brillantes el filme cuenta con una fotografía excelente que ayuda a crear la atmósfera inquietante que caracteriza a la película. El uso de la luz y las sombras es particularmente impresionante, lo que contribuye a la creación de un ambiente que mantiene al espectador en tensión durante toda la proyección.
En definitiva, Araña sagrada es una película muy recomendable para aquellos que disfrutan del thriller y quieren ver algo un poco diferente y perturbador. La historia, intrigante, atrapa y la edición dinámica, así como sus excelentes actuaciones, mantiene la atención. Va más allá del entretenimiento: hay una reflexión feminista y social importante que vale la pena ver también.