Un conflicto bélico muy lejos del país, entre Rusia y Ucrania, golpea severamente la producción de fertilizantes y, de la mano, la de alimentos del campo en México.
El campo mexicano es complejo. Ante la competencia internacional se encuentra en desventaja. Mientras en otras naciones hay un sinnúmero de subsidios, en el país no existen.
Hay algunos apoyos que se reparten con intenciones políticas, mas no productivas, lo que provoca al final de cuentas que se estanque la producción de alimentos para los mexicanos.
Por ejemplo, los altos precios de los fertilizantes causan estragos en los productores agrícolas de todo el país, sin excepción. Estos insumos, que juegan un papel fundamental en todos los cultivos, en los últimos meses se dispararon en costos de producción en más de 60 por ciento.
Por ejemplo, en el maíz el paquete tecnológico pasó en el estado de Guanajuato de 42 mil 630 a 68 mil 208 pesos.
Aunque no es un problema privativo de México: la Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) proyectó que los precios base de los fertilizantes aumentaron 13% a nivel global. Este incremento se debe a la crisis bélica entre Rusia y Ucrania.
Sin embargo, hay otros factores que estimulan el aumento del precio de los fertilizantes importados: el alza en los fletes marinos y el encarecimiento del gas natural, materia prima usada en su producción.
Definitivamente esto incide en México debido a que el encarecimiento provoca que las instancias que realizan el reparto de fertilizantes lo suspendan o en su defecto los escondan para hacerlos aún más difíciles y caros. De los 5.4 millones de toneladas que se consumieron en nuestro país de fertilizantes en 2021 al menos 62% se cubrió con importaciones, lo que indica el alto grado de dependencia respecto del mercado exterior.
Rusia destacó como principal proveedor del campo mexicano el año pasado, con una participación de 27% de las compras, principalmente de urea.
Esa guerra en Ucrania, incomprensible para muchos, ya deja productos caros para el consumidor y en algunas partes hay productos inalcanzables para los más pobres. Por ello es fundamental alejar toda influencia política o electoral de la distribución de ese producto. El alimento de los mexicanos es cuestión de seguridad nacional.
Pieza clave
Ricardo Monreal hizo una jugada de salón al impulsar a Alejandro Armenta como presidente de la Mesa Directiva del Senado. No era fácil. Demostró que tiene de su lado la mayoría de Morena y que es una pieza clave en el ajedrez político del presidente.
El huachicol es uno de los problemas que afectan al estado de Hidalgo y que se combatirá de la mano del gobierno federal. En este entramado de complicidades y corrupción se sabe de patrullas municipales que cargan con huachicol. Es inconcebible el grado de corrupción, el grado de poder de penetración a través de ese dinero, como la humedad en los estratos sociales.
Dinero
La Bolsa Mexicana de Valores, que preside Marcos Martínez Gavica, lleva más de once meses estancada en nuevos proyectos y en retener los que tiene. La salida de Sanborns, de Carlos Slim, marca una línea en la que se ha confiado ese mercado que día a día se hace más pequeño. La otra bolsa, Biva, que aún es más chica, y que preside Santiago Urquiza, va de mal en peor. Promoción, diría el maestro de administración, promoción.
Responsabilidad Social Corporativa Ante los desastres naturales que afectan a las diferentes regiones del país Organización Soriana, que preside Ricardo Martín Bringas, y Soriana Fundación se unen a la Cruz Roja Mexicana para instalar un centro de acopio en beneficio de los afectados por las fuertes lluvias registradas en Sonora. Los clientes de Soriana y el público en general podrán unirse a esta causa con la donación de víveres destinados a Guaymas, Empalme y zonas aledañas.