Sarah Bernhardt fue una famosa actriz francesa que protagonizó muchas de las obras más populares del siglo XIX, como La dama de las Camelias, de Alejandro Dumas; Ruy Blas, de Victor Hugo; o Fédora y La Tosca, de Victorien Sardou, entre otras.
En 1889 se fue de tour a Estados Unidos con la obra de Fédora, en la que interpretaba el papel de la princesa Fédora. En la obra, Sarah llevaba puesto un tipo de sombrero que popularmente se conoció, a partir de entonces, como fedora. Al principio era de uso exclusivo de las mujeres.
Se trata de un sombrero flexible y de ala corta originario de Italia. También se le conoce como Borsalino, que es el nombre de la empresa que lo inventó.
En la jerga rioplatense de los veinte hasta los cuarenta este sombrero se conoció como Gacho, gracias a un exitoso tango de Carlos Gardel. La pieza se titula Gacho gris.
Uno de los hombres importantes que usaron este sombrero fue Igor Sikorski, inventor, diseñador y productor de los primeros helicópteros. Volaba con un fedora que él decía era su “casco”.
Hay muchas personalidades que han usado este tipo de fieltro. En el cine y la música también se ha utilizado. Hay que recordar que Al Capone y la mayoría de los gángsters de su época lo popularizaron.
Frank Sinatra fue otro personaje que se lo ponía con frecuencia (dicen las malas lenguas que él también era mafioso).
Harrison Ford, durante la grabación de Indiana Jones, llevaba uno puesto para esconder su cara en las escenas de acción y que fuera difícil distinguirlo de sus dobles de acción.
Otro famoso que lo usó fue Michael Jackson. En algunos de sus conciertos tapaba su cabeza con uno blanco. Además lo inmortalizó en el videoclip de Billie Jean.
En la serie White collar el falsificador Neal Caffrey lo lleva en varios capítulos. John Galt, el personaje de La rebelión de Atlas, de Ayn Rand, usa un fedora cuando actúa de incógnito. En la serie The Blacklist el exagente del gobierno que interpreta James Spader utiliza uno. Clint Eastwood usa varios en las películas de Trilogía del dólar.
Igualmente, en la icónica película de culto de 1980 The Blues Brothers, John Belushi y Dan Aykroyd traen unos de color negro.
¿Y qué me dicen del temido personaje de Pesadilla en la calle del infierno, Fredy Krueger? Bueno, hasta el standupero mexicano Franco Escamilla lo lleva puesto. Tan es así, que lo llaman el comediante del sombrero.
El fedora es una prenda que lleva más de un siglo presente, sin que pase de moda. Al parecer, según algunos sicólogos, es porque da a sus portadores un aire de misterio y elegancia.
¿Ustedes no tienen uno? Yo tengo varios que nunca uso, pero están bien colgados en mi armario.
Invencible
Tris tenía un par de fedoras que su padre le había heredado: uno negro y otro café. Los usaba con regularidad. Claudia, su amiga, le decía que le daba un aire de misterio y le recordaba al famoso detective Dick Tracy, porque además tenía la nariz aguileña.
En cierta ocasión, cuando perseguía a unos maleantes, uno de ellos sacó su pistola y alcanzó a perforar parte del sombrero. Al joven Tris no le pasó nada.
Cuando regresó a su casa su papá le preguntó por el agujero en el fieltro. Tris le platicó lo sucedido: había sacado rápido su pistola e impactado dos plomazos en la frente de uno de los maleantes como respuesta. Al segundo lo había alcanzado con una bala certera en la nuca.
Tris, intrigado, le preguntó a su papá por qué no había recibido nunca ni un disparo. Tristán papá le platicó la historia del gitano y la maldición que recayó sobre ellos. Tristán papá había buscado ayuda con su amigo el santero Juan Carlos García, quien aventó los cocos e invocó a Obatala, la deidad suprema de la religión Yoruba. También invocó a Shangó, el atributo de la justicia. Su santero protegió a los dos alzando un embrujo. Después, Tristán papá le confesó a su hijo que no podía deshacer la maldición, pero sí podía protegerlos a los dos. Esa es la razón por la que a Tris y a su papá nunca les pasó nada grave. Desde entonces, Tris es invencible, casi como El Santo o
Blue Demon.