Se puede confiar en las malas personas: no cambian jamás.
William Faulkner
Siempre me ha parecido interesante cuestionar si el ser humano nace o se hace malo. Creo que todo ser humano nace con bondad y debido al entorno en el que se desenvuelve, así como a su circunstancia individual, tiene la capacidad de hacer cosas malas, pero esto no significa que sea malo.
Ahora, un nuevo estudio publicado en Scientific Reports revela que la combinación perfecta de rasgos de la personalidad “oscuros y brillantes” puede ayudar a predecir el comportamiento delictivo de las personas.
El lado positivo o “brillante” incluye rasgos como la estabilidad emocional y la conciencia, mientras que el lado negativo u “oscuro” incluye rasgos como el narcisismo y la sicopatía.
A través de la investigación los expertos descubrieron que los niveles más altos de inestabilidad emocional (neuroticismo), toma de riesgos (apertura) y tendencias dañinas (sadismo, engaño) se asociaban a una mayor probabilidad de actividad delictiva, destacando el engaño y el neuroticismo como fuertes indicadores de reincidencia.
El estudio incluyó a más de 570 participantes, divididos en dos grupos: una muestra general de personas y un grupo de reclusos de dos prisiones de máxima seguridad en Rumania. El grupo de reclusos se dividió a su vez en dos subgrupos: delincuentes primerizos y reincidentes.
Hallazgos
Para medir los rasgos de la personalidad de los participantes los investigadores utilizaron dos herramientas principales. En primer lugar, evaluaron el modelo de los cinco factores de la personalidad, que incluye los rasgos de neuroticismo, extraversión, apertura a la experiencia, amabilidad y conciencia. En segundo lugar, utilizaron el modelo para evaluar rasgos oscuros de la personalidad como el sadismo, el engaño, el derecho narcisista y la insensibilidad.
Uno de los hallazgos más importantes fue la asociación entre neuroticismo y conducta delictiva. El neuroticismo, que refleja la tendencia a experimentar emociones negativas como la ansiedad, la ira y la tristeza, se relacionó sistemáticamente tanto con la realización de delitos por primera vez como con la reincidencia.
Los individuos que puntuaban más alto en neuroticismo eran más propensos a cometer delitos y a reincidir. Curiosamente, el estudio descubrió que la extraversión, que suele asociarse con la sociabilidad y la asertividad, era menor tanto en los delincuentes primerizos como en los reincidentes en comparación con los individuos sin antecedentes penales.
También descubrieron los investigadores que el sadismo o la tendencia a disfrutar causando daño a los demás, estaba relacionado con la comisión de delitos por primera vez, pero no con la reincidencia.
Otros rasgos oscuros como la insensibilidad (falta de empatía), la venganza y el derecho narcisista (sensación de merecer más que los demás) no aparecieron como predictores significativos de la conducta delictiva o la reincidencia en este estudio.
Aunque estos rasgos se han asociado con el comportamiento antisocial en otros contextos, no parecen desempeñar un papel importante en la distinción entre delincuentes, indican los investigadores.
Y de acuerdo con la líder del estudio no deberíamos utilizar etiquetas como un predictor inequívoco de la conducta delictiva, ya que los factores “oscuros” de la personalidad se encuentran universalmente en la población general.
Y tú, ¿reconoces alguno de estos rasgos en ti?