La famosa Coca-Cola es una bebida que nació en 1886 de manos de John Pemberton, un farmacéutico de Atlanta, quien utilizó agua carbonatada y un líquido de color caramelo, elaborando esta bebida inicialmente como medicina para dolores estomacales y de cabeza.
Dice la leyenda urbana que John accidentalmente vertió el agua con el líquido sin querer y al probarlo le gustó tanto, que la comenzó a vender como refresco por cinco centavos.
Patentó la gaseosa y la llamó Vino Coca Pemberton, pero luego traspasó los derechos cuando ya se conocía como Coca-Cola. En su primer año despachaba nueve vasos por día. El nombre se originó debido a sus dos ingredientes básicos, que eran hojas de coca, nueces de cola y alcaloides sicoestimulantes. Hay que recordar que en esa época el uso de la coca era permitido y comerciado en prácticamente todo el mundo. Siendo John un farmacéutico, tenía acceso a este producto.
El brebaje fue el primero en el mercado. Doce años después otro farmacéutico en Carolina del Norte, de nombre Caleb Bradham, inventó la Pepsi. Hoy Coca-Cola pertenece a Berkshire Hathaway con activos de unos 97.7 billones de dólares y un capital social aproximado de 27.5 billones de dólares. Cuenta actualmente con 86 mil 200 empleados. La línea de enlatado puede producir mil 800 latas por minuto, aproximadamente dos millones al día, y se venden alrededor de mil 900 millones de botellas de algunas de las muchas marcas que tiene la compañía en todo el mundo.
Aquí en la República Mexicana la embotelladora de Coca-Cola Femsa en los primeros meses de este año ha vendido unos 118 mil 645 millones de pesos, gracias a los precios y a sus estrategias de mercadeo. La empresa es una de las industrias que más plástico utiliza, con 2.9 millones de toneladas de envases flexibles al año.
México es el mayor consumidor de refrescos en el mundo. Se calcula que per cápita se consumen 163 litros al año, lo que resulta en al menos una lata por día por cada mexicano en promedio.
En toda la República hay 20 plantas embotelladoras y 116 centros de distribución que atienden a alrededor de 30 millones de personas. Chiapas es el estado que consume más este producto, no solo en el territorio nacional, sino que tiene el deshonroso primer lugar a nivel mundial. En el orbe hay 24 millones de puntos de venta de la bebida, pero hay tres países donde no se permite su venta: Cuba, Corea del Norte y Rusia. Se dice que encontrarla en estas naciones puede llegar a costar hasta 40 dólares por una Coca bien fría (hay un mercado negro para todo).
La primera botella de vidrio la realizó en 1899 el diseñador Earl R. Dean y se llamó la botella de la Hobble skirt porque simulaba la falda de las mujeres de aquella época. Esta icónica imagen ha cambiado a lo largo de los años, pero se podría decir que prácticamente desde hace más de 130 años ha mantenido la misma forma. Los diseñadores afirman que estaba inspirada en la vaina del cacao. Es, pues, un claro ejemplo del Art Nouveau. La compañía hizo un concurso en 1917 y de ahí surgió la botella Contour. El diseño era para que fuera reconocida al tacto y visible en la oscuridad.
Para 1977 Coca-Cola registró la forma de la botella como marca comercial. Esto quiere decir que ninguna otra empresa puede usar una forma parecida sin infringir los derechos de propiedad intelectual. Es, pues, la bebida más consumida en el mundo, las aguas negras del imperialismo, como dirían algunos seudomarxistas. Pero, ¿a poco no con estos calores se antoja con muchos hielos?
Extraño caso
Tris llegó primero que nadie a la escena del crimen. El muerto tenía encajadas dos botellas de Coca-Cola en los ojos. Además, parte de otra botella le había cercenado el cuello. El suelo estaba embarrado de una mezcla de sangre y refresco. Junto al cuerpo, una nota decía: “Tú, que te creías la última Coca del desierto, eso te ganaste por mamón”.
En el mensaje se encontró una huella que resultó ser del asesino. El MP perdió el informe de las huellas dactilares y el caso pasó al archivo sin resolver. Al poco tiempo encontraron el cadáver de un sujeto de nombre Carlos Betancour, muerto de la misma forma que el occiso encontrado meses antes. Nadie supo qué pasó. El único que conocía toda la verdad era el buen Tris.